Si procedemos a analizar la evolución de las ventas mes a mes, y lo hacemos por la unidad de medida comparable que son los litros de leche equivalentes (litros necesarios para producir los productos elaborados), vemos que en enero las ventas cayeron 5,3%, en febrero 2,7% (a igual cantidad de días), subieron 7,6% en marzo, y 5,7% en abril, claramente las dos últimas cifras se correlaciona con las denominadas compras de pánico ocurridas en la segunda quincena de marzo e inicios de abril. Ya se ve un menor crecimiento en abril y según los datos disponibles, en mayo y lo que va de junio, las ventas retomaron un ritmo similar al que presentaron a principios del año (información de Consultoras de Mercado Interno e Industrias Lácteas consultadas por OCLA).
Como ya lo venimos indicando en informes anteriores existe una caída importante en las ventas de los productos con mayor valor agregado y/o unitario, tales como yogures (salvo bebibles de litro), flanes y postres, leches saborizadas y quesos de pasta semidura o muy alta humedad. Producto de las compras para stock familiar y por los controles de precios, se visualiza un incremento significativo en las leches no refrigeradas y una situación similar en manteca, dulce de leche, quesos cremosos y yogures bebibles de litro.
En base al Balance Lácteo estimado por OCLA a abril del 2020 surge un consumo total del 1,8% superior al año anterior, el consumo per cápita para el 1° cuatrimestre del 2020 es de 56,9 litros/habitante de leche equivalente, que anualizado arroja un valor de 184 litros, 0,9% por encima del registro del año 2019, y de 182 litros, igual al año anterior, si consideramos la misma cantidad de días para ambos cuatrimestres. Las cifras que arroja la metodología del Balance Lácteo son muy similares a las de ventas totales del cuadro superior (Resolución 230/16).
Respecto a los datos que captura la Resolución 230/16 es el de aquellas empresas que muy probablemente hayan incrementado sus ventas en los meses de pandemia/cuarentena y las industrias que han sufrido fuertes caídas en sus ventas (incluso algunas que dejaron de procesar) no estén registradas ni en el período previo ni durante la cuarentena y por lo tanto estas cifras pueden indicar un nivel de ventas superior al real de todo el mercado (100% de la leche procesada y comercializada en el mercado doméstico).
Otro dato relevante, corresponde a leches no refrigeradas ya que en la muestra hay una empresa con datos completos en el período ene-abr 2020 pero que no cuenta con datos completos en el cuatrimestre del año anterior.
Fuente: OCLA