La caída en la molienda de soja durante el mes de septiembre, llegando a 1.895 millones de toneladas, ante las 2.066 millones del mes anterior, tuvo un impacto negativo en la capacidad instalada de la agroindustria, al bajar el Índice de 35% a 32%, según el último informe de la Cámara de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores de Cereales.
“Si tomamos en cuenta el volumen de molienda trabajando a capacidad máxima, la capacidad ociosa aumentó 3%, llegando ahora al 68%, muy lejos de los guarismos del 2017 cuando la capacidad de uso llegó al 83%”, señaló el relevamiento.
A su vez, en octubre también se registró una baja en el ingreso de camiones de soja en comparación con el mes anterior: 23.131 contra 34.242 en septiembre, lo que representó 740,000 toneladas frente a 1.096.000 del mes anterior. En maíz, el ingreso de camiones se desplomó a 14.835 frente a los 30.771 de septiembre y en trigo, octubre fue de los meses con menor registro de los últimos 4 años, con 1.974 camiones frente a los 2.420 (Oct 2022), 8.486 (Oct 2021) y 2.420 (Oct 2020).
En tanto, en lo que respecta a exportaciones, los números tampoco fueron alentadores, entendiendo que hubo una significativa caída en los embarques de poroto Soja en septiembre, con 200.000 toneladas versus las 272.000 de agosto; de harina de soja con 1.041.000 toneladas mientras frente a más del doble en agosto (2.196,000), y de aceite, que bajó en un mes de 314.000 toneladas a 207.000.
En maíz, también se sintió fuerte el descenso de las ventas al exterior, llegando a 2,8 millones de toneladas contra las 4 millones de agosto. El único producto que se salvó fue el aceite de girasol, con una recuperación en las exportaciones en septiembre (70.461 toneladas), duplicando a agosto.
Así, en octubre, la liquidación de divisas fue de apenas US$ 743 millones, siendo el peor registro en 18 años. En el acumulado anual, alcanzó un total de US$ 17.492 millones, lo que implica una fuerte baja con respecto al mismo periodo y récord del 2022 (US$ 35.035 millones)
REDACCIÓN ON24