Los expertos proyectan que el cultivo se se recuperará y piensan en una producción de 4,30 millones de toneladas para 2024 y de 4,70 millones para 2025.
En ese sentido, Alejandro Gallego, del Consejo Directivo de Asagir, dijo que la provisión de semillas no será un problema porque la industria semillera está invirtiendo para mejorar la oferta. El año pasado muchos productores argentinos se quedaron con las ganas de sembrar girasol porque no había disponibilidad suficiente de híbridos en el mercado.
Una delegación india de 25 empresas aceiteras visitaron nuestro país para participar del Congreso que tuvo lugar la semana pasada en Buenos Aires. Se trata de la misión comercial más grande de la historia que vino desde India, primer comprador mundial de aceites.
“La intención de las reuniones fue hacer crecer el aceite de girasol, que tiene una gran reputación de calidad en los consumidores de India, Argentina es una potencia agroindustrial e India un socio estratégico”, destacó Gustavo Idígoras. La idea es que Argentina empiece a posicionarse en el mercado mundial de aceite de girasol.
“Hoy nuestro país se ha transformado en un centro de atención mundial en el abastecimiento de aceite de girasol y soja, con oportunidades de crecimiento y desarrollo”, destacó el ejecutivo.
