Es alto oleico, le hace frente a las malezas de difícil control, tiene un alto contenido de materia grasa y en el sur de Buenos Aires rinde un 15% a 18% más que el promedio de la zona. El híbrido de girasol Aromo 105 CL Oleico reúne todas esas propiedades y lo viene demostrando en sus principales zonas de influencia.
“Mientras que a los primeros girasoles Clearfield se los acusaba de ofrecer un bajo tenor de materia grasa, el Aromo 105 CL Oleico es un híbrido de la nueva generación que además de ser rico en oleico y permitir un efectivo control de malezas, ofrece un nivel de contenido de aceite equiparable a las mejores líneas del mercado”, explicó Javier Latorre, gerente del Servicio Técnico de la Región Sur de Nidera.
Las zonas en las que este híbrido ofrece sus máximos potenciales son el centro y sur de la provincia de Buenos Aires, el oeste de Buenos Aires y noreste de La Pampa.
“Los productores valoran los altos rindes que viene ofreciendo en las últimas campañas -explica Latorre-, y destacan especialmente su estabilidad a través de los años, de las fechas de siembra y de los diferentes ambientes”.
El técnico señaló que en el Sudeste, con la tecnología que aplican los productores, el promedio de rendimiento de los últimos años ronda los 3.000 kilos por hectárea. “Esto representa no menos de un 15% a 18% más que el rinde medio de los girasoles en esa región”.
En la jerga técnica se dice que el Aromo 105 CL Oleico “es un híbrido bien armado”. De esta forma se sintetizan sus propiedades respecto del ciclo “que le permite escapar perfectamente bien de las heladas”, la calidad de la planta “que no presenta vuelco ni quebrado aún en la zona más ventosa como la costera”, su fortaleza sanitaria “que le permite defenderse de enfermedades muy relevantes para el girasol como Verticillium, Sclerotinia y Mildew” y “el buen cuajado de sus granos”. Además, se defiende muy bien del ataque de pájaros ya que vuelca sus capítulos (“que quedan mirando al piso”, dice Latorre).
En el Sur, la fecha de siembra del Aromo 105 CL Oleico se extiende durante todo octubre y primera quincena de noviembre, mientras que en el oeste se puede adelantar y comenzar la siembra a mediados de septiembre.
La característica CL de este cultivar, que permite la aplicación del herbicida residual Clearsol, es una de sus grandes fortalezas, ya que ofrece la posibilidad de realizar controles postemergentes de malezas de hoja ancha y de gramíneas anuales. El listado de malezas que controla la tecnología Clearfield es extenso, pero para el caso del girasol se destacan los abrojos (grande y chico), las brásicas, la rama negra, el yuyo colorado y la verdolaga, entre otras especies que son duras de combatir y reducen los rendimientos girasoleros.
