Pasaron más de cuatro del inicio de la pandemia en Argentina. Aquel marzo del 2020 fue un momento de incertidumbre para muchos, pero en el gen argentino está la insistencia para imponerse. Bajo esta premisa nació Chamba en noviembre de ese año y se instaló en Moreno 75 bis para llevar comida del local directo a la mesa de sus clientes. Cuatro años después, la firma dispuso la apertura de su segundo local en San Lorenzo 1111, casi esquina Sarmiento. “Chamba significa trabajo y eso es lo que somos: trabajadores”, contó Romina, dueña del local, en diálogo con ON24.
Con la experiencia de su primer local, al cual el público abrazó desde un primer momento, la familia que está detrás de Chamba siempre tuvo en mente expandir el negocio. “Empezamos por este y tenemos en mente seguir por todo Rosario”, aseguró la dueña.
Entre los dos locales, la marca emplea a unas 15 personas, entre los que se encuentran varios integrantes de la familia.
La idea de plantar bandera en el comercio de calle San Lorenzo está ligada a “acercarse al microcentro” de la ciudad. Pasaron unos tres meses remodelando el inmueble de 100 m2 para ponerlo a punto.
Chamba se caracteriza por la producción propia de sus productos y además de viandas, en su menú se pueden encontrar pastas congeladas, panificación y servicio de cafetería al paso. Cabe destacar que Chamba nació y creció comercializando sus elaboraciones bajo la exclusiva modalidad de Take Away, poniendo el foco en el contacto con el cliente y el trato en el local.
Este local, abierto de lunes a viernes de 8 a 19 y sábados de 9 a 14, será el segundo de la marca, pero no el último. Ya que los emprendedores tienen en mente seguir llevando a Chamba por los barrios como Martín o Fisherton “para que todo el mundo coma rico”, sentenció Romina.
