A la espera de conseguir “luz verde” oficial para su ingreso al mercado Chino, el Grupo Olio acaba de comprar el 50% del paquete accionario del Frigorífico Alberdi, planta localizada en la localidad de Oro Verde, Provincia de Entre Ríos.
La operación fue confirmada a ON24, por parte de Ariel Olio, titular del Grupo inversor que continúa, según el empresario, en franca expansión con vista a consolidar sus exportaciones al mercado europeo, haciendo foco en el apetecible mercado oriental.
Según explicó Olio, la incorporación al grupo empresario del frigorífico entrerriano, va en línea con el plan de desembarco en el mercado asiático.
El proceso de habilitación que está gestionando el Frigorífico Alberdi, es idéntico al que pasara días atrás Frigorífico Paladini, ya preparado para exportar las primeras 200 toneladas de carne de cerdo a oriente.
En la actualidad, la planta de Oro Verde, que funciona desde 1983, faena 10.000 cabezas bovinas mensuales. A partir de la habilitaciones en trámite, Olio planifica una ampliación en etapas, que asciende a una inversión aproximada de 22 millones de dólares, a partir de un crédito que será evaluado por el Banco Nación.
La entrada a China, esperada para las próximas semanas, dispara las obras de inicio de la primera etapa, que sumará a los 350 puestos de trabajo actuales, 250 operarios adicionales, una verdadera revolución productiva para la provincia, con impacto nacional.
Un frigorífico en el radal presidencial
Cabe recordar que el Presidente Mauricio Macri, visitó la planta el pasado 17 de julio, destacando el crecimiento del frigorífico que en los últimos años, logró triplicar el personal.
No es menor para el gobierno nacional, tener la oportunidad de celebrar, al igual que hizo con Paladini, el comienzo de exportaciones a China, como muestra cabal de que la economía va por el buen camino, como repite sistemáticamente el presidente.
Más sobre el Grupo Olio
Es una empresa familiar dedicada al procesamiento de subproductos de origen animal, derivados de la industria frigorífica, destinado a satisfacer necesidades primarias de la cadena alimenticia y farmacéutica.
Dentro de las empresas que integran el Grupo Olio se encuentran:
Los Reartes
Es una empresa de producción agrícola-ganadera con más de 25 años de experiencia, destacada por la constancia y un único rumbo: carne de la mejor calidad. En cuanto a la agricultura, se diversifica produciendo los principales cultivos del país, como soja, trigo, maíz, sorgos, etc. Trabajando en más de 13.000 hectáreas con agricultura de precisión y ganadería y bajo un Sistema de Gestión de Calidad logramos los mejores índices y rindes de ambas actividades, cuidando los suelos, el personal y la comunidad que lo rodea.
Díaz & Forti
Es una compañía con una larga experiencia en el rubro de la exportación. Lleva productos de las economías regionales argentinas al mundo.
Nació como una empresa familiar, que comenzó atendiendo a productores del interior del país, generando vínculos con nichos de mercado puntuales en el exterior.
En 2016, además de contar con convenios de elevación en diferentes puertos del país, decidió tomar la posesión del Puerto de Barranqueras generando valor agregado para la producción de la zona, exportando desde Chaco al mundo.
Familia Lequio
La historia nace en 1878 con Don Pantaleón José Lequio, oriundo de Cuneo, Cortemiglia, región de Piamonte, ubicada al noroeste de Italia, quien encabeza el oficio de tripero en la familia, mediante la limpieza de intestinos ovinos.
En buscas de mejores oportunidades emigra a la Argentina y se asienta en Chascomús, provincia de Buenos Aires, donde forma su familia junto a Josefa Mazzucco y conciben 7 hijos. El primogénito, nace en 1906, llamado José Esteban Domingo Lequio, quien decide dar sus primeros pasos buscando su independencia laboral en la Provincia de Santa Fe, ciudad de Villa Gobernador Gálvez, allá por los años 40, cuando se dio origen a unos de los más importantes polos industriales del sector frigorífico.
En aquellos tiempos, se retiraba de los “mataderos” un desperdicio contaminante que logró convertirse, gracias a estos pioneros de la industria, en un producto tan noble y significativo para el chacinado: Noble porque en cada etapa de su proceso lleva la participación del trabajo humano; significativo porque fue nada menos que el producto que dio origen a la conservación natural de alimentos y sirvió al desarrollo de la industria alimenticia.
Los destinos de la actividad quedaron desde los años 70 en manos de sus hijos José y Luis Lequio, quienes decidieron a fines de la década del 90 emprender nuevos horizontes independizándose en cada rama familiar.