Salvador Calogero sabe una cosa o dos sobre tecnología. Ingeniero, inició su carrera en IBM y trabajó varios años en empresas de tecnología — en Ventas, reconoce, como quien desea el puesto de CEO y no de CIO– hasta que dió el salto al mundo de las finanzas. Hoy, a cargo de 4Finance, la empresa detrás de su producto de microcréditos Vivus, cuenta cómo es el negocio de los microcréditos a escala local y por qué decidieron apostar a una estrategia agresiva de expansión en el país, ofreciendo préstamos 100% web a 30 días y a tasa cero.
¿Cómo funciona el negocio de 4Finance en la Argentina?
Con 4Finance trabajo desde 2012. Ellos decidieron, en 2015, entrar en el negocio de los mirocréditos en la región, e hicieron pie en la Argentina con 4Finance. La casa matriz está ubicada en Letonia así que no es una startup argentina pero operamos todo localmente: yo estuve a cargo de iniciar el negocio acá, buscar oficinas, contratar gente. Aunque acá hace poco que estamos, en el mundo fintech es una empresa muy conocida; líder porque tiene operaciones en Europa y Estados Unidos desde que nació. Eso nos da un respaldo; hay espalda financiera para bancar el negocio.
En Argentina, lanzaron con una estrategia comercial muy agresiva: préstamos 100% online a 30 días pero con tasa cero. ¿Cuál es en negocio?
Ahí no hay un retorno; es tasa negativa. Es parte de la estrategia comercial que adoptamos, sabiendo que el mercado de los microcreditos tiene mucho potencial pero que todavía hay que evangelizar. La idea es ganar al cliente, que vuelta. Entonces el primer crédito que otorgamos –que es hasta $6.000– y se tiene que devolver en el corto plazo, 30 días, lo ofrecemos gratis.
¿Y cuál es el porcentaje de retorno?
El promedio de personas que vuelven a pedir un crédito Vivus luego de su primera experiencia es del 65%, mientras que mensualmente 600 nuevos clientes optan por el producto por recomendación de actuales consumidores.
En el segmento de los microcréditos, generalmente hay más riesgo porque los clientes pertenecen a un segmento al que les da la espalda el sistema bancario en general. ¿Ese mismo perfil es el que saca un crédito web?
En general, quienes necesitan un microcrédito y lo sacan al corto plazo lo hacen porque necesitan la plata ya. Por ejemplo, se les rompió el auto o la computadora y necesitan cambiarlo ya y no tienen la plata. No es el inversor, aunque se podría beneficiar de una tasa baja.
¿Es tan fácil como las entidades físicas que prometen créditos “a sola firma”?
Sí. La plataforma en donde se tiene que solicitar el préstamo se llama Vivus, que es nuestra línea de créditos a corto plazo. Con cualquier dispositivo se puede acceder a la web responsive, porque todavía no tenemos App para Argentina. Se completa la aplicación online en minutos y recibe rápido una confirmación sobre la aprobación de su préstamo, que hacemos mediante un algoritmo. Después, transferimos el dinero a la cuenta de banco que se solicita. Los préstamos son bajos –de $2.000 a $6.000– y el usuario puede cancelarlo antes de los 30 días. Lo que ofrecemos es recursos para resolver una necesidad puntual o una emergencia sin desestabilizar la economía mensual…
