A la hora de hacer política están primeros, y más en el lobby nacional. Los cordobeses ahora van a la conquista de su segundo Parque Nacional. Medio Ambiente de la Nación les dio el visto bueno a un proyecto que hoy está en la Legislatura para que el gobernador Schiaretti dé el primer paso.
“El proyecto tiende a convertir la histórica Estancia Pinas, una enorme extensión de más de 105 mil hectáreas en el oeste de la provincia, en un Parque Nacional que represente a la región geográfica del Chaco Seco. La superficie de esta estancia triplica a la del Parque Nacional Quebrada del Condorito, hasta hoy el único parque nacional que tiene Córdoba. Además, se encuentra junto a la pequeña reserva natural de Chancaní, que sólo tiene cinco mil hectáreas y juega un rol importante en la preservación de la biodiversidad en esa zona del país”, así describe el medio cordobés La Voz, la región pronta a convertirse en área natural protegida.
Aprovechando la impronta que el Ministro de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman, le quiere dar a las reservas nacionales, Córdoba detectó la necesidad y allí fue a plantear la oportunidad, para consolidarse como uno de los polos turísticos más fuerte del país, con un plan de conectividad aérea que se va consolidando con la nueva gestión de Mauricio Macri.
En una estrategia nacional distante a la que plantea Santa Fe, Córdoba sabe cómo sacar recursos aún en épocas de vacas flacas.