Temporada 2008/2009. El Real Madrid intensifica su estrategia para lograr llevar al portugués Cristiano Ronaldo del Manchester United al conjunto blanco, una estrategia que no dará resultado hasta un año después, en el verano de 2009, cuando al conjunto británico no le quede más remedio que aceptar la estratosférica oferta que Florentino Pérez pone encima de la mesa de los dirigientes de los Diablos Rojos y permitir la salida del jugador luso con destino Madrid.
Sin embargo, pocos son los que conocen que durante esa temporada 2008/2009, el Manchester United elaboró un concienzudo plan que tenía como objetivo final retener al jugador en Manchester y para lo que colaboraría, de manera muy directa, el entonces sponsor técnico del Manchester y uno de los principales patrocinadores del portugués: la multinacional norteamericana Nike.
Una línea de productos CR7 con el respaldo de Nike
Tanto marca como club pusieron encima de la mesa una oferta procedente de Nike casi tan importante como la que presentaba el Real Madrid: ofrecían al jugador hasta 29 millones de euros anuales procedentes de una nueva línea de productos con la marca CR7 (creada en 2006 por el jugador y gestionada por sus hermanas) auspiciada, promocionada y potenciada por la propia Nike, a semejanza de lo que hacía en otros deportes, como por ejemplo, la marca Jordan en la NBA con Michael Jordan. Sin embargo, la decisión del portugués era inamovible y sus deseos por jugar en el club blanco, un club adidas recordemos, acabaron con la estrategia de Nike y el United para retener al jugador en Manchester.
Hace tan sólo un año, Cristiano Ronaldo “se sentía triste” en el Real Madrid, una tristeza cuyo tratamiento le costó al club dirigido por Florentino Pérez un nuevo contrato de 17 millones de euros anuales de ficha para el crack luso. Sin embargo, durante el periodo que duró esa tristeza, nuevamente las marcas que patrocinan al Manchester United aunaron esfuerzos para tratar de devolver al club de Old Trafford al jugador portugués. Así, tanto Nike, como Aon o como Chevrolet, elaboraron un estudiado plan cuyo objetivo era colaborar de manera activa y directa para tratar de recuperar a uno de los más importantes futbolistas del mundo para el club al que patrocinaban, conscientes de los beneficios que ello implicaría para las marcas. El plan consistía en aportar una importante cuantía económica para que el United pudiera presentar una oferta irresistible al jugador que le sacara de la tristeza en la que estaba sumido.
Adidas lo intenta con Messi
No sólo Nike y el entorno del United están detrás de que un jugador recale en un equipo u otro. Hace ahora un año, el argentino Leo Messi comienza a entrar en una depresión parecida a la que tenía el portugués con el Real Madrid. Depresión que vuelve a ser superada con la renovación del crack argentino hace tan sólo unos meses por el conjunto azulgrana con unas cifras similares a las de crack luso en el Real Madrid. Sin embargo, hace un año como decimos, el entorno del jugador filtra que en esa misma pretemporada el argentino ha recibido tres importantes ofertas de tres clubes para tratar de incorporar a sus filas a Leo Messi: el Bayern de Munich, el Chelsea y el Real Madrid. Tres entidades con dos denominadores comunes: el primero, su intención de hacerse con el argentino. El segundo, y clave en todo esto, su sponsor técnico: la multinacional alemana adidas.
Así, durante ese tiempo, corrieron ríos de tinta acerca de la presunta trama organizada por la marca alemana para tratar de hacer que el argentino, al que tiene como principal embajador, recalara en un club adidas, para lo cual estaría dispuesta a poner encima de la mesa más de la mitad de la cláusula de rescisión que tenía Messi con el Barça, esto es, 125 millones de euros más otros incentivos para el jugador y el club que los fichara, como un incremento en las aportaciones de adidas al contrato de sponsorización. La marca jamás llegó a confirmar este extremo, pero su ambigüedad a la hora de despejar dudas dieron todavía mayor verosimilitud al asunto.
Las marcas, cada día más involucradas en los traspasos
Todo ello nos lleva a un asunto clave: las marcas y firmas comerciales, patrocinadoras personales de jugadores o patrocinadoras oficiales de los clubes, ya sean a través de las figuras de la sponsorización técnica o no, tienen un mayor peso decisorio cada vez en los procesos de traspasos e incorporaciones de jugadores a los clubes. Han dejado de ser unos simples agentes pasivos, relegados a la mera figura de aportadores de dinero al club para pasar a formar parte del decisivo círculo de influencia dentro de los clubes donde se deciden las cuestiones más importantes y relevantes de los mismos.
Los 94,2 millones de euros que abonará adidas al Manchester United es más que evidente que serán un aval más que suficiente para que la toma de decisiones que lleve a cabo en los próximos años la familia Glazer tenga muy en consideración la opinión de la marca alemana al respecto, lo mismo que ocurre con Chevrolet. Al igual que el periodo de renovación en el que se encuentran Nike con el FC Barcelona le habilita a plantear sus quejas respecto al temor sobre la enorme influencia que adidas está adquiriendo dentro del vestuario azulgrana con las incorporaciones de este años.
Y a nadie se le escapa el importante papel que ha jugado adidas en las negociaciones para que Diego Costa, al que incorporó como nuevo embajador de la marca tan solo unos meses antes, acabe recalando en el Chelsea de Mourinho. O los intentos de Puma por recuperar para el Arsenal a un jugador como Cesc Fàbregas (que finalmente ha ido al Chelsea) o porque Balotelli se incorpore a los gunners.
Poco a poco los clubes se van convirtiendo en sucursalesde las grandes marcas. Y aunque la voz cantante la suelen llevar las más visibles, los sponsors técnicos, muchas son las que están involucradas en las decisiones finales a la hora de participar en las negociaciones de traspasos de jugadores, sobre todo de las grandes estrellas.