Por Garret Edwards – Enviado de ON24
La revolución de las low cost probablemente termine convirtiéndose en uno de los pináculos del gobierno de Cambiemos y del mandato del presidente Mauricio Macri. Cocarda de su ministro de Transporte, el apasionado de las bicicletas, no otro que Guillermo Dietrich. Es que escribo estas líneas desde un vuelo de Avianca rumbo a Mar del Plata para cubrir en representación de ON24 el 54 Coloquio de IDEA. Y si bien la niebla hizo que el cambio de avión en el Aeroparque Jorge Newbery que debía durar 45 minutos se convirtiera en un par de horas, la experiencia demuestra la superación tanto relativa y absoluta del sistema anterior.
Durante esa espera pude compartir un interesante almuerzo con ejecutivos de IDEA, esta prestigiosa institución nacional que desde hace más de cinco décadas consecutivas se encarga de intentar hacer reflexionar a la Argentina, un país que está de olvido y siempre gris, y que suele preferir el cortoplacismo a cualquier otra opción. En esa comida de camaradería se nos sumó el afamado director de cine, y ganador del Oscar por Mejor Película Extranjera (“El Secreto de sus Ojos”, 2009), Juan José Campanella. Un hombre afable, directo y honesto, que departió con la mesa y se mostró accesible a la charla y al debate.
Campanella, igual que nosotros, tenía que arribar a destino en horario para disertar en el panel principal de la noche de apertura de IDEA. Se barajaba en la mesa la posibilidad de ir en automóvil hasta Mar del Plata, algo que no terminaba de cerrar por los tiempos y por las reticencias del propio multipremiado director: nos confesó que él siempre prefiere ir por aire antes que por tierra. Y que si de trenes se trata, los de afuera y no los nacionales. Al menos por el momento. Quizá en algunos años también se vaya ganando la confianza perdida en los medios de transporte argentinos clásicos, algo que los aviones ya van logrando acabadamente en nuestro país.
Quedan por delante tres días repletos de actividades en IDEA. Aunque con un leve retraso, todo se acomoda para dar comienzo al evento que marcará el mes de octubre, y que señalará sin dudas el tobogán de fin de año de cara a las elecciones de 2019. Elecciones en todos los niveles. Porque será hora de elegir, será hora de definiciones. Y preferible reflexionar y pensar antes de poner el voto en la urna.
