Lo que le falta a las ciclovías

 A partir de la implementación del nuevo programa de bicicletas públicas Mi Bici Tu Bici, que se pondrá en funcionamiento en los próximos meses, se sumarán 20 kilómetros de ciclovías que conectarán puntos estratégicos de la ciudad, según lo informado en la mañana del lunes 12 de enero por la secretaria de Servicios Públicos, Clara García.

Anoticiados sobre esta decisión de avanzar en construir bicisendas ahora en el área central, la Asociación Casco Histórico hizo públicas sus consideraciones al respecto, habida cuenta del funcionamiento de las ya implementadas en otras zonas de Rosario.

La importancia de que las ciclovías constituyan un circuito integrado y previsible de origen y destino es uno de los primeros puntos destacados desde la Asociación, al tiempo que agregan haber “detectado sectores que no se conectan entre si o sus ciclovías terminan en un punto muerto, dejando a su usuario sin incentivo a continuar o hacerlo totalmente desprotegido, con la peligrosidad que esto entraña, como sucede en la Avenida avellaneda, hacia el norte antes de ingresar al Viaducto”.

Un punto polémico dentro de las propuestas es el de la implementación de una barrera física. “Deben ser pensadas no solo para incentivar el uso de la bicicleta, sino que a su vez, debe garantizar integridad del Ciclista ,mediante la implementación de una separación física ininterrumpida durante su recorrido, con el transporte automotor, ya que las mismas, se encuentran lindando con el carril rápido de vehículos, como sucede en Avenida Pellegrini”, indican desde la Institución. 

La doble mano es otro de los ítems a evaluar. Desde la Asociación Casco Histórico destacan que sería importante “no avanzar en la construcción de bicisendas de doble mano, ya que las mismas son causales de accidentes, sobre todo en la mano que es contraria al cilista, porque al no ver los semáforos se encuentra expuesto a riesgos de accidentes.”

Finalmente, hay cuestiones importantes que atender que tienen que ver con la toma de conciencia por parte de los ciclistas y efectivos controles de tránsito por parte del organismo pertinente. Sensibilizar a los ciclistas usuarios del sistema, para que circulen con los mecanismos adecuados que permitan su correcta visualización nocturna a fin de evitar accidentes. En cuanto a la necesidad de implementar estrictos controles de tránsito, desde la Asociación citan a modo de ejemplo la costumbre que tienen algunos motociclistas de utilizar las bicisendas “para adelantarse en embotellamientos y como no tienen separación física del carril automotor, el grueso de las ciclovias actualmente se volvieron un gran riesgo para el ciclista.”

 

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