La defensa Jorge Oneto agota los recursos disponibles para sacarlo de prisión. El financista rosarino implicado en la causa de fraude inmobiliario se encuentra detenido desde mediados de octubre, apuntado por la Fiscalía de Delitos Económicos de intervenir en la apropiación ilegítima de un inmueble.
Ayer, tuvo lugar una nueva audiencia en Tribunales, donde la defensa de Oneto, integrada por los abogados Jorge Ilharrescondo y Oscar Romera, interpuso sus argumentos para evitar una nueva prórroga de la prisión preventiva, aduciendo que el financista se encuentra detenido en estado de inocencia, no existiendo justificativo alguno para continuar de esa forma.
¿De qué se lo imputa a Oneto?
A inicios de octubre, Jorge Oneto junto a otras diez personas fue imputado como partícipe de una de una red que perpetró estafas reiteradas, asociación ilícita y lavado de activos.
Según explicó uno de sus abogados, Jorge Ilharrescondo, en la mañana radial de Fisherton CNN, la imputación discurre por dos carriles distintos. “Primero, que la compra del campo (una propiedad perteneciente originalmente a Ana Josefina Luppi) fue una operación ficticia celebrada a precio vil que complementa una serie de actos tendientes a consolidar el despojo a la señora Luppi, formando parte de un circuito de lavado de activos”. Y segundo, “que el señor Oneto formaría parte de una asociación ilícita junto al resto de los implicados, que tendría como objetivo la captación de inmuebles en situación de abandono por parte de sus dueños, que luego serian traspasados ilegalmente a otras personas, siendo él quien financiaría esas prácticas”.
Lo cual, para Ilharrescondo, constituye “una serie de imputaciones alejadas de la realidad, que lo único que han hecho es afectar el honor de Oneto y tenerlo hasta el día de hoy privado de su libertad”.
Qué pasa ahora
Ayer, los abogados de Oneto apelaron la prisión preventiva bajo los argumentos de que se trata de un hecho (el crimen imputado) “que no entra bajo ninguna disposición legal como delito”; en tanto, “cuando adquirió el inmueble que motiva toda esta cuestión, lo hizo de buena fe (…) Nosotros probamos acabadamente que en el momento en que se firmó la escritura en la que intervino Oneto, a partir de una venta realizadas por los señores Jaeff (Marcelo) y Abdala (Pablo), no tenía conocimiento del origen fraudulento del inmueble”, explicó Ilharrescondo.
Y siguió, “ninguna de las escuchas dan cuenta de ese conocimiento. Lo que aconteció, es que una vez que se celebró la escritura, a partir de una denuncia de la señora Luppi, ingresó en el Registro de la Propiedad una inscripción como litigiosa de ese bien, cuya causa nunca fue informada a su escribano (Luis María Kurtzemann), con lo cual, ninguno de los intervinientes tenían conciencia de los problemas que tenía ese inmueble”.
La opinión de los abogados defensores es que “no se dan los requisitos que habilitan un encierro como el que sufre (Oneto)”. A la vista de que –según sostienen- no hay delito ni peligrosidad procesal.
La pata política
Asimismo, Ilharrescondo cree que existe de forma notoria una causa política detrás de todo este asunto. “Hay un hecho objetivo, que es que la Provincia ha solicitado ser querellante, y cuando la política se mete en el palacio de la Justicia, ésta sale corriendo por la ventana. La política está contaminando esta causa”, sostuvo. Y concluyó, “hay que preguntarle al gobernador cuales son los objetivos por los que entra en esta causa y no en otras que son mucho más graves”.
A SABER
El viernes, el juez Acosta dará a conocer día y hora de lectura del fallo sobre la prisión preventiva.
REDACCIÓN ON24