“Los primeros que le dimos al running el formato de empresa fuimos nosotros”, asegura el Director de Ecorace, Producciones Deportivas.
Hace 10 años, cuando correr por la ciudad y en grupo era cosa de pocos o de locos, Juan lanzó Eco Fitness, una empresa de entrenamiento del running con una serie de servicios complementarios, principalmente los vinculados a la salud y cuidado de las lesiones de los atletas.
“Eco Fitness ofrecía sentido de pertenencia, fuimos el primer grupo de running. Luego Nike nos contacta y nos pide que trabajemos para ellos y así nos convertimos en el Nike Running Team hasta que esta multinacional se retira de la disciplina y volvimos a nuestros orígenes con Eco Fitness”, comenta el empresario que domina la lógica de este deporte como ninguno.
“El pilar del éxito de este negocio, de que la gente se quede en el grupo, son los Objetivos” explica Echeverría. Entendiendo por tal a las metas que todo líder de grupo pone como próximo desafío. Así subgrupos de corredores dentro de los grupos de running entrenan para cruzar los Andes o hacer su primera maratón de 21 K. Siempre se trabaja sobre un plan para llegar a cumplir una misión que con el correr del tiempo se hace cada vez más exigente.
Apasionado y gran conocedor de este fenómeno “urbano” explica sus inicios:
“El running comienza desde una nueva tendencia en todo el sector de la salud, desde la medicina prepaga hasta el Estado, se dieron cuenta que una población sana es menos costosa y para eso comenzaron acciones de prevención, o sea que el running comienza por una cuestión estrictamente de salud, no social. Y la que luego le inyecta un crecimiento exponencial es la mujer. Hace 10 años este deporte tenía solo un 5% de participación femenina, hoy es de un 41%”.
Un deporte “cool”
La clase media y media acomodada lo adoptó como deporte y se volvió “consumidora de” una incalculable cantidad de productos que se generan en torno al atletismo: zapatillas, calzas, medias, porta celular, bandana, cinturones de hidratación, geles para carreras de alto rendimiento, … no hay techo para la industria del running.
“Todos quieren vestir como el deportista de elite, así corran 8 minutos el km, se compran zapatillas de $3000” describe Juan Echeverría, ya especializado en el perfil de consumidor que tiene su empresa.
“Otro producto en crecimiento, muy demandado por este target son las carreras de aventura, donde podés pagar hasta u$s 1000 por una inscripción, más todo lo que genera una travesía.
Las empresas venden un sueño. Columbia vende el sueño de cruzar los Andes, tienen toda la logística para hacerlo y venden todos los productos que necesitás”
La líder de marca outdoor es en sí misma “El cruce de los Andes”. Todos los veranos austral, precisamente en el mes de febrero, y desde hace 15 años, organiza el cruce para corredores de todo el mundo.
“Todas las empresas se quieren relacionar a este deporte, sea porque es cool o porque toda marca quiere estar al lado de lo que hace bien, de lo que es saludable. Para un Casino por ejemplo, pagar $500.000 por un maratón no es plata y sí le reditúa en su posicionamiento en la ciudad.
De llave en mano a partner
“Somos una productora que brinda servicios. Nos encargamos de la clasificación vía chips de las competencias más todo el soporte tecnológico, garantizando la exactitud de los resultados de las pruebas, a brindar la estructura de escenarios cubiertos o descubiertos, tribunas, gradas, a proporcionar los trofeos y medallas, hasta la coordinación y asesoramiento de los trámites necesarios para una carrera”.
La complejidad de la realización de un maratón es para los que están fuera de este negocio algo tan impensado, que por el propio desconocimiento se puede asumir un riesgo altísimo. Se trata de organizar nada menos que cientos de corredores en la vía pública, a los que se suma el público que acompaña a lo largo de los kilómetros.
Por eso las grandes marcas ajenas al deporte compran maratones “llave en mano”.
Una maratón lista para que el CEO de la empresa, si lo desea, solo se preocupe en ir a correrla, representa, sin exagerar, decenas de actividades.
Los posibles rubros de un maratón según su envergadura
Clasificación electrónica.
Inscripciones online.
Medición de circuito.
Envío masivo de Newsletter
Servicio SMS personalizado.
Cobertura online del evento en redes sociales.
Reloj de pie y auto guía.
Arcos inflables.
Pórtico estructural.
Generador eléctrico.
Gacebos.
Carpa inflable.
Conos.
Racks ciclistas (bicicleteros).
Carpas estructurales.
Escenarios cubiertos y descubiertos.
Vallados (tipo reja y freestand).
Techos móviles y automatizados.
Tribunas gradas y plateas con o sin asientos plásticos.
Torres, stacks y mangrullos.
Cerramientos, pisos, alfombras.
Puentes, pasarelas, palcos.
Escaleras y rampas.
Mástiles (porta banderas).
Soporte de pantallas.
Cintas delimitadoras.
Carteles de km.
Fondos de escenario.
Medallas.
Remeras.
Bolsas de Agua Watering.
Y lo más importante: gestionar dentro de una pesada burocracia para lograr el corte de calles, con la presencia de guardias municipales.
Capítulo aparte para el seguro de los corredores que trotan a través de kilómetros en una vía pública colmada de público y de imponderables.
Pongamos precio a un maratón
¿Cuánto cuesta la realización de un evento?
Por más que lo intenta Echeverría no puede ser concreto en una cifra porque no hay un estándar de carrera, y hay cientos de variables con diferentes combinaciones a medida del que quiera organizarla.
“Nos podemos asociar a una empresa : yo me quedo con las inscripciones por ejemplo, es una forma de sociedad.
Llave en mano es otra. Mucha gente me dice -Juan quiero hacer este maratón y solo quiero ir a correr y disfrutar-. Otros quieren ganar plata y se quieren asociar a nosotros en el negocio” explica el organizador del próximo organizador de La Segunda.
“Una carrera te puede salir de 500.000 a 3 millones de pesos. Si le pones 5 drones y la televisas en vivo y querés que tu evento se vea en todo el mundo, solo el plan de medios te sale más que el mismo maratón. En cambio si corres por una zona rural y no le das ni la medalla te puede costar 300.000 pesos. Podés armar un evento con todo el glamour haciendo la entrega de kits en los salones de Puerto Norte a entregarlos en un gimnasio público. Todo es muy variable y adaptable a cada empresa.
Las expo maratón, un negocio dentro de un negocio
Las grandes carreras cuentan con su expo maratón, un negocio en desarrollo dentro de otro.
¿Por cuánto se puede multiplicar el número de visitantes de un maratón de 6000 corredores? Cuatro podría ser el promedio teniendo en cuenta los familiares, amigos y curiosos que se acercan al lugar.
La tendencia además de comprar compulsivamente en las expo maratones es enorme. Será por el estado de ansiedad o la adrenalina del corredor, también por las promociones hasta “reventar” stock, donde se descubren anteojos de sol a $300 o calzas 30% más baratas que en el shopping.
Tal como pasa con las inscripciones para correr, los stands también tienen un cupo que se agota con facilidad en los eventos ya instalados con público asegurado.
“Las expo son un evento aparte el día de un maratón. El running ofrece una gran exposición de marcas. Un stand te puede salir en un evento chico, como piso 2000 pesos y de allí a 15.000 y más”
Tarifas para todos
La variedad de esponsoreo deja la posibilidad de que toda empresa, no importa el tamaño, encuentre su lugar en un maratón.
Las grandes son las dueñas exclusivas, desde la protocolar Bolsa de Comercio de Rosario hasta el tradicional Grupo Asegurador La Segunda y General Motors. El negocio de estas marcas es mostrarse con exclusividad.
Otras se organizan como negocio y allí el tarifario de las esponsorizaciones es variadísimo. En el Maratón de Canal 5, el Sponsor Master para la carrera de este año costará 67.000 pesos, el Sponsor Senior baja a 35.000 pesos y en ambos casos se ofrecen muchos segundos publicitarios.
Pero el rango de auspicios de otras carreras puede bajar sustancialmente ofreciendo la presencia compartida en escenarios y podios.
Al respecto Echeverría asegura que los auspicios en Rosario son muy bajos en comparaciones a los eventos porteños: “Rosario una plaza muy difícil porque la competencia no es feroz. Dos grandes se ponen de acuerdo en no participar o poner un techo a los auspicios y así bajan los precios”.
Maratón Puente Rosario Victoria Mr … Mi techo soy yo
El Maratón Puente Rosario Victoria es un producto registrado de Ecorace.
“Fue mi idea y tengo una exclusividad de eventos deportivos sobre el puente que generé a través de años de experiencia. Me llevó 2 años organizar el primer maratón del puente. Y ahora ese evento toma un año, en rigor cuando termina, descansás 20 días y ya están enviando notas para la edición del año que viene.
La gente cree que estos eventos son sencillos, pero generan muchísima responsabilidad, si no manejás bien las cosas pueden llegar a ser un desastre” explica el titular de Ecorace.
Poner a trotar 5.000 almas en la calle o una ruta, en el caso del puente, no es sencillo nio desde lo logístico ni de los riesgos que esa acción involucra.
El colarse a correr, decisión que algunos toman por “agarrados”, otros de rebeldes y algunos porque sintieron ganas el mismo día cuando la inscripción ya estaba cerrada, es para el organizador un problema que le representa un potencial accidente sin cobertura, un costo adicional porque consumen la hidratación del que pagó y la mala imagen relacionada a la falta de control.
“El porcentaje de colados no es un dato menor, estamos hablando del 15% del total de inscriptos. La gente no piensa en el daño que nos puede ocasionar. Si un colado hace caer a un corredor debidamente asegurado a través de su inscripción, yo tengo que pelear ese daño con la aseguradora porque me puede decir que yo soy responsable del control de quienes corren”.
Al ser consultado acerca del crecimiento del Maratón del Puente que ya va por su 5to aniversario, con la posibilidad de aumentar en 1000 atletas más para llegar a los 6.000, Echeverría no dudó en responder: “El techo me lo doy yo. Uno calcula, predice a través de la experiencia cuantos se van a anotar y a partir de allí se proyectan los gastos”.
Un dato relevante aportado por su organizador es la estimación de lo que dejan solo los corredores del maratón del puente a Rosario: “El consumo de hotelería, transporte, espectáculos y gastronomía es de aproximadamente 6 millones de pesos solo teniendo en cuenta a los corredores sin sumar acompañantes. El 43% de los atletas del maratón del puente no son de Rosario: consumen producto Rosario”
¿Cuándo llega el punto de saturación?
A la fecha hay en el calendario de la Asociación Rosarina de Atletismo más de 32 maratones registradas que ya comenzaron a correrse este año. La pregunta es hasta donde no se llega a un punto de saturación de estas carreras y toda la movida del running.
“Los maratones que ya cumplieron su ciclo son los de corta distancia. Hoy mucha gente corre 10 k durante la semana, ya no se puede hacer una carrera cuya principal distancia sea esa como lo fue en los inicios. Hoy hay muchísima gente que corre 21 k incluso ya son multitudinarias las carreras de 42 k con 3000 participantes que hacen esa distancia. Los desafíos se ponen más exigentes, y para las carreras cortas hay que buscar un plus que pase por un show o la excusa de una fiesta como lo fue la Energizer Night Race. Era linda porque tenías tu linterna, corrías de noche y la carrera terminaba en una fiesta.
Hoy las carreras de aventura son las que tienen el techo más alto. La gente se motiva con el desafío y el turismo deportivo. El club, los amigos con el asado son reemplazados por los grupos de running. Hoy el círculo íntimo de muchos está en su grupo de running.
El otro fenómeno del éxito de este deporte es que podés corres a toda edad y hay gente que nunca hizo practicó nada y que se hace deportista a partir de los 40. En el running vos sos el protagonista y no hay mayor desafío que competir contra uno mismo”.
Por Fabiana Suárez
f.suarez@on24.com.ar