Ar Zinc, la empresa del Grupo Glencore Internacional, cierra sus puertas en forma inexorable pese a las declaraciones de funcionarios provinciales que prometen redoblar los esfuerzos para que la ex Sulfacid siga funcionando.
Con fecha 25 de febrero de 2016, la empresa anunció el cierre definitivo de su fábrica en Fray Luis Beltrán. El contundente comunicado explica la difícil decisión. Precisamente en su segundo párrafo, la empresa expresa claramente algunos de los motivos de la dramática determinación:
“La evaluación fue iniciada como resultado de las dificultades financieras que afronta la compañía, originadas en las condiciones económicas negativas que sufre desde hace cinco años y la reciente imposibilidad técnica de mantener el horno principal en operaciones”.
Pese a la claridad de la información, comenzaron las especulaciones acerca del verdadero cierre. ¿Qué se oculta detrás de la decisión de la planta industrial?. “¿Por qué no me averiguás bien cuál es la dificultad así hablamos con ellos?”, solicitaba días pasados un ministro nacional a un diputado de esta provincia.
Mientras tanto, en declaraciones a los medios, funcionarios de la provincia también daban una luz de esperanza sobre la suerte de la empresa.
Fuentes confiables de alto conocimiento técnico acerca del funcionamiento de la industria y de la realidad del mercado internacional en el que compite, aseguraron a esta redacción que el cierre es inexorable por las razones que auténticamente se dieron en el comunicado. Si bien la empresa tuvo que enfrentar históricamente a un sindicato muy combativo, “malísimo” fue precisamente el término empleado, como así también el escenario inflacionario que pone a cualquier empresa argentina en desventaja con el resto del mundo; la causa de peso, no reversible con subsidios temporarios, es su escaso volumen de producción. “La planta produce 40.000 cuando la empresa que le sigue en tamaño en el mundo produce 200.000” , explicó esta fuente para tomar real dimensión de la situación. Y abundó: “Los directivos hicieron todo lo que corresponde hacer en una situación como esta. Se reunieron con el Secretario de Industria, Martín Etchegoyen, quien se desempeña bajo la cartera de Francisco Cabrera. También lo hicieron con el Ministro de Trabajo, Jorge Triacca, y lógicamente con autoridades provinciales”.
“No hay que buscar más allá de la palabra oficial de Ar Zinc”, concluyó.