La Nación publicó un relevamiento sobre el costo del consumo eléctrico por provincia. De acuerdo a los resultados publicados, Santa Fe tiene la tarifa más cara del país con $456 mensuales, mientras que Santa Cruz tiene la más baja con $105 mensuales. Sin embargo, el precio mayorista es el mismo para todas las prestadoras, la diferencia radica en los precios que fija cada una en concordancia con el marco regulatorio aprobado por los gobiernos provinciales.
El estudio fue efectuado considerando un consumo de 200 kW mensuales, el promedio residencial de una vivienda sin excesos de artefactos eléctricos. No se computaron descuentos por ahorro de energía ni tarifa social.
Los valores más altos publicados pueden verse en el siguiente cuadro:
Como puede observarse, Santa Fe, Neuquén y Córdoba son las tres con mayores costos. En el caso de la provincia limítrofe, la polémica se disparó más recientemente, luego de que el martes pasado se anunciaran aumentos de hasta el 100% en la tarifa del servicio para industrias. La misma, también reavivó la discusión acerca de la aplicación de los subsidios nacionales y la heterogeneidad de los valores abonados entre las provincias.
Las tarifas provinciales se componen del costo mayorista de la electricidad y del valor que agrega cada prestadora. El primero es homogéneo para todo el país y cubre el costo de generación, mientras que el segundo depende de las distintas empresas y del marco regulador de jurisdicción provincial en que actúa cada una.
Las quitas de subsidios para las empresas proveedoras y los últimos aumentos en el mercado mayorista fueron las principales causas de impacto sobre las facturas. Sin embargo, la heterogeneidad de los valores entre provincias, debería ser cuanto menos mucho menor.
¿Qué pasa en Santa Fe?
En el caso de nuestra provincia, la prestadora estatal es la Empresa Provincial de la Energía (EPE). El marco regulatorio actual permitió varios aumentos a lo largo del último año y disparó varias polémicas al respecto. ON24 había entrevistado al diputado provincial del PRO, Federico Angelini, quien adujo que “La EPE tiene un mal servicio, está mal administrada y permanentemente genera déficit”. Además, agregó que “primero aumenta por voluntad propia y luego se sube a los aumentos del precio mayorista para justificar una nueva suba”.
Por otro lado, desde el ejecutivo provincial, se anunció en reiteradas oportunidades la necesidad de constituir una Comisión Técnica y actualizar la legislación sobre el cuadro tarifario. Precisamente ayer, Miguel Lifchitz encabezaba un acto la Legislatura, en el cual ponía sobre la mesa la relevancia de revisar la regulación sobre la empresa estatal: “Este año tenemos que avanzar en el marco regulatorio de la entidad eléctrica para toda la provincia que pueda ordenar la intervención de la empresa provincial y también de las cooperativas eléctricas”.
La necesidad de un organismo de control fue secundada además por Verónica Geese, secretaria de Energía de Santa Fe, quien en una entrevista con el medio El Litoral publicada 23 de abril del corriente, afirmaba: “En el anteproyecto de marco regulatorio que queremos discutir no contemplamos un ente regulador, sino una Comisión Técnica que tendría ese rol, pero con otra estructura, mucho menor”. También afirmó: “Vemos que la participación privada en la generación de energía es uno de los objetivos del gobierno nacional, que quiere una mayor desregulación. Nosotros necesitamos un organismo que vigile cuestiones técnicas, de calidad, de servicio, y de tarifas, frente a un panorama más cambiante”.
Fuente: La Nación
