El escenario de 2022 plantea nuevamente a la escasez de dólares como un límite al crecimiento y revertir la balanza turística vuelve a ser una prioridad. Para esto, el Ejecutivo buscará aprobar en el Congreso una normativa que extiende el programa Previaje (que otorga reintegros de hasta el 50% a quienes consuman servicios turísticos en el país), por tres años más. Además, la norma incluye una serie de beneficios fiscales para quienes realicen nuevas inversiones.
Así, uno de los puntos centrales de la iniciativa de extender hasta fines de 2025 Previaje, apuntan a enfocar la inversión estatal en los momentos de baja temporada para sostener la demanda en el sector. En efecto, el proyecto tendrá tratamiento legislativo durante el 2022.
En tanto, también va a contener un capítulo dedicado a estimular las inversiones de argentinos y extranjeros en el rubro. Incluye la reducción de contribuciones patronales para los nuevos empleos, la generación de un bono con crédito fiscal vinculado al monto de la inversión y el acceso al Mercado Único y Libre de Cambios. Además de beneficios para atraer el turismo receptivo.
Desde el Ministerio de Turismo sostienen que el sector será “protagonista en la etapa económica que se viene”. Para ello, el objetivo es que el marco normativo impulse la actividad, genere unos 250.000 puestos de trabajo e incremente su participación en el PBI, que actualmente representa el 9%, pero según el propio Lammens podría alcanzar el 12% o el 13%.
Por otra parte, el Gobierno ampliará los fondos para la línea de crédito a tasa 0% que ya está vigente para el sector turístico. Los ministerios de Desarrollo Productivo y de Turismo y Deportes, junto al Banco de la Nación Argentina sumarán $2.000 millones para reforzar la situación financiera de pymes, monotributistas y autónomos del rubro.