El último informe del Centro de Investigaciones Sociales y Económicas de Fundación Libertad elaboró las cifras de la recesión en Santa Fe, con una contracción en la provincia de Santa Fe acumulada durante los primeros siete meses de 2014 una merma del 2,5% y diez meses
consecutivos de caída de actividad. Las empresas son reticentes a contratar más trabajadores en un contexto donde las ventas caen. Además el escenario para los próximos meses sigue dominado por la incertidumbre y la desconfianza. Este escenario no tarda en impactar de lleno en los bolsillos de las familias santafesinas, que deben enfrentar el costado más crudo de la recesión.
Los indicadores de la producción no cesan las señales de alerta. Las exportaciones con origen en la provincia de Santa Fe alcanzaron en forma acumulada para el período enero-agosto de 2014 la suma de u$s 11.084,6 millones, lo cual representa una caída del 2,3% en relación al mismo lapso de 2013.
Dos rubros clave para la economía provincial como son la construcción y la industria automotriz también evidencian contracciones. Por un lado, las automotrices marcaron en el mes de septiembre que la producción provincial alcanzó las 8.255 unidades, cifra que marcó una caída del 24% anual. En tanto el consumo de cemento portland registró para agosto una caída del 4% anual, reflejando necesariamente una desaceleración en la actividad de la construcción.
En lo que respecta a las finanzas provinciales, para el noveno mes del año se alcanzó un superávit de 139,3 millones de pesos. No obstante, en forma acumulada para el período enero-septiembre se registra un rojo fiscal que asciende a $34,1 millones, siendo el segundo más bajo del año ya que al comenzar el 2014, el rojo fue de $14 millones.
El contexto actual necesita imperiosamente que el Gobierno provincial trabaje para los santafesinos, promoviendo políticas públicas de claro impacto contracíclico, facilitando la creación de empleo por parte de los privados y sectores productivos.
Por el contrario, el control del gasto en pos de la eficiencia del mismo sigue siendo una materia pendiente. Los gastos del gobierno continúan creciendo a tasas del 38% anual, para financiar este aumento de gastos, se presiona sobre el sector privado con una mayor carga tributaria (ya récord), situación que atenta contra la creación de nuevas unidades productivas, con las consecuencias negativas que esto implica para la economía local y provincial.
REDACCION ON24
Fuente: CISE
