Desde octubre de 2013 la economía provincial experimenta un retroceso que aún no ha frenado, de hecho, las expectativas en materia económica no son alentadoras, según explica el último reporte del CISE de Fundación Libertad. A este escenario se le suma la contracción del consumo.
La economía provincial no se muestra ajena a la actual coyuntura nacional: caída de actividad, elevada inflación, pérdida de competitividad del tipo de cambio real y déficit fiscal son algunas de las caras de la realidad económica del país y sin dudas repercuten en los bolsillos de los santafesinos.
El análisis frío de los números indica que se mantiene un marcado estancamiento en el nivel de actividad, y lo más preocupante es que el mercado laboral comienza a resentirse. Por cierto, según el índice de demanda laboral de la ciudad de Rosario y Gran Rosario, calculado por el Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella, registró en febrero (última información disponible) una baja de 0,4% con respecto a la medición de enero. Es el cuarto mes consecutivo en que el índice presenta una variación interanual negativa. Recordemos que según los datos del INDEC, la tasa de desempleo alcanza el 6,7% para el Gran Rosario.
Con respecto a la realidad local, en incremento en los alquileres alcanzó hasta un 80% anual en el centro de la ciudad. A su vez, en materia de empleo, el 27,8% de los trabajadores de la construcción fue puesto en blanco.
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