Tras la caída de reservas del Banco Central, la devaluación de enero y la posterior suba de precios, Axel Kicillof advirtió que en la Argentina “no hay problemas económicos graves”. El ministro de Economía consideró que el país sí enfrenta “desafíos, dificultades y necesidades”, pero no grandes inconvenientes como en otras épocas de la historia nacional.
“Este Gobierno ha tenido una claridad política como pocas veces se ha visto y también una claridad en el discurso. Los objetivos de la política económica no están por encima de la política en general: (los objetivos son) crecimiento, mejora en la redistribución de riqueza y creación de empleo”, explicó.
Una vez más, Kicillof volvió a apuntar contra los medios de comunicación que informan sobre la cotización del dólar libre, así como contra las consultoras privadas que elaboran sus propios índices de precios. Contra aquellos estudios que aseguran que la inflación de febrero será incluso superior al 3,7% medido por el Indec en enero, advirtió: “No tienen la más pálida idea de lo que pasó con la variación de precios”.
“La verdad es que no hay que prestarles atención. (…) No se pusieron de acuerdo en decir si febrero tuvo una variación de precios mayor o menor que enero. Si uno tomara por validos sus números podría decir que la variación de precios fue del doble o de la mitad”, aseguró, en diálogo con el programa “El fin de la metáfora” de radio Nacional Rock.
El funcionario explicó que “el Estado no puede hacer un relevamiento de la fisonomía de ese sector (financiero). A uno no le queda mas que guiarse por los comentarios: que es un mercadito diminuto, que no se vende ni se compra prácticamente nada…”. Y apuntó: “El precio debe estar cartelizado, no debe ser transparente ni debe haber competencia; cuando sube o baja a uno no le llama la atención, porque la cotización la mueven unos pocos”.
Aseguró además que “la salida de los temas económicos de los diarios” tiene que ver con que ya no existen elementos para realizar “una campaña para sembrar el miedo, el pánico y, sobre todo, la sensación de (que viene) el fin del mundo“.
“No es que hoy la economía no amerite tener un espacio (central) en los medios, sino que los datos no son tan fáciles de transformar. No es noticia lo bien que funciona el programa Precios Cuidados”, ejemplificó el funcionario, quien de todos modos advirtió que en cualquier momento la prensa puede desatar otra andanada de anuncios negativos: “Esperan la próxima oportunidad para hacer sonar las trompetas del apocalipsis”.
En línea con la política oficial del kirchnerismo, insistió en que distintos medios de comunicación hace años que advierten que “todo está mal, que todo va a ir peor y que se va a estrellar la economía”. Pero “si uno repasa la agenda pública de estos años debe haber al menos 20 episodios como esos”, sostuvo.
La discusión salarial fue otro de los temas que abordó Kicillof: “El Gobierno no pone techo a los aumentos en las paritarias, que son mayormente privadas. La Presidente les dijo a los empresarios que si dan incrementos altísimos, lo hagan con responsabilidad, según su capacidad de pago”. “Para que al industria y el país crezcan, tiene que haber excelentes salarios”, indicó.
Fuente: Infobae
