Frente a la suba de precios en los productos de consumo masivo, y tras una reunión con representantes del sector, el gobierno tendría resuelto abrir las importaciones. El potencial es porque la medida anunciada por el vocero presidencial aún no es oficial.
“Entendemos que la economía se va normalizando. En esta línea, se ha tomado la decisión de abrir definitivamente las importaciones de determinados productos de la canasta familiar en pos de poder hacer los precios más competitivos en beneficio de las familias y de los consumidores argentinos,” dijo en las últimas horas Manuel Adorni. Agregó que serán para las importaciones de alimentos, bebidas y productos de limpieza, cuidado e higiene personal.
Entre otras cosas, el Banco Central recudiría el plazo de pago de estas importaciones, pasando de un esquema de pago en 4 cuotas (30, 60, 90 y 120 días) a un plazo de pago en una sola cuota a los 30 días. Para Maria Gabriela Calvo, presidenta del Centro de Despachantes de Aduana, sería una medida acertada, que festejarían todos los importadores.
También suspenderían por el plazo de 120 días el cobro de la percepción de IVA “adicional” y el impuesto a las ganancias a las importaciones de estos productos. “Me gustaría ver el abanico de productos, porque se nombró hasta la pasta dentífrica,” le dijo a ON24 María Gabriela Calvo. “Quizás, tras el anuncio, están analizando en profundidad la medida antes de publicarla en el boletín oficial,” evaluó la ejecutiva.
Y en ese análisis, quizá esté que no se trata de la misma persona que ya importaba estos productos, y que ahora pueda traerlos con muchas más facilidades, pero manteniendo precios altos en la góndola. Algo que tranquilamente podría ocurrir en nuestro país. Por su experiencia, la presidenta del Centro de Despachantes de Aduana entiende que esto debería “jugar a favor de la góndola”. Sobre todo si entraran nuevos actores en el mercado, “aquellos que venían importando y dejaron de hacerlo por las dificultades para pagar”.
Por lo pronto, trascendió que algunos de los productos alcanzados serían las bananas, papas, carne de cerdo, café, atún, productos de cacao, insecticidas, shampoo y pañales, entre los mas destacados.
Textiles
Dias atrás, la Secretaría de Comercio eliminó un trámite por el cual se le exigía a los fabricantes e importadores de textiles, prendas y calzado información “redundante” sobre la composición porcentual y el material de sus productos que ya estaba detallada en la etiqueta. El cálculo oficial es que esa burocracia representaba para el sector un costo de USD 5 millones y un millón de declaraciones juradas anuales.
Así se oficializó a través de la Resolución 49/2024 publicada en el Boletín Oficial, que deroga y modifica diversos artículos de las resoluciones 26/1996 y 850/1996 de la ex Secretaría de Comercio e Inversiones y del ex Ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos, al igual que la Resolución 404/2016 de Comercio. En detalle, se eliminó la Declaración Jurada de Composición de Producto (DJCP). Para María Gabriela Calvo, esta fue una excelente medida, ya que se trataba de “un trámite que no tenía demasiado sentido”.
