El pasado 6 de noviembre se conoció la nómina de plantas que podrán comercializar en España. Teniendo en cuenta el contexto y las últimas medidas, en las que Argentina salió seriamente perjudicada, se dio lo que se esperaba, ninguna planta fuera de Europa aparece en la lista.
Algunas de las plantas argentinas que se presentaron a esta convocatoria fueron excluidas alegando razones administrativas injustificadas. Mientras que, a otras se las excluyó sin estas excusas, alegando que no suman el puntaje necesario en un “rating” que aparentemente realiza el ministerio de Industria español pero que nunca aclaró en base a qué parámetros se adjudican los puntos. Según, un comunicado de la Cámara Argentina de Biocombustibles, “esta resolución es claramente una nueva medida arbitraria cuyo objetivo es excluir a las empresas argentinas del mercado español”.
La lista de plantas que sí han resultado adjudicatarias pertenecen a 42 empresas, todas europeas, de las que veintisiete son españolas, cinco alemanas, cinco italianas, dos británicas, una portuguesa, una letona y una holandesa.
Del mismo modo, el presidente de CARBIO, Luis Zubizarreta, habló de esta medida y consideró: “La Unión Europea sacó un arancel que es una barrera gigante, y ahora, lo que sucede en España es más grave porque quita la posibilidad de exportar al principal destino en Europa. Esto es totalmente arbitrario, alguien decidió que Argentina no está en la lista y nos quita presencia en el mercado más grande que tenemos. Hay que tener una negociación, pero está claro que hay una intencionalidad de bloqueo, eso, en definitiva, juega en contra del consumidor europeo que no puede acceder a un producto bueno y barato”.
CARBIO considera que todas las plantas remitieron en tiempo y forma la documentación solicitada por la autoridad de aplicación española por lo que estamos frente a una nueva barrera no arancelaria que excluye a las empresas argentinas de vender en el principal mercado europeo de biodiesel.
España importaba desde la Argentina biodiesel de soja por un valor superior a los 800 millones de dólares anuales.
Esta medida que se suma a la reciente fijación del derecho antidumping en la UE significa la confirmación de una crisis terminal de la industria exportadora argentina, con las consecuencias económicas y sociales derivadas de esta falta de mercado.
Ante esta medida CARBIO expresa que existe una clara discriminación del Gobierno español en la asignación de cuotas de biodiesel a proveedores extracomunitarios. Atento a ello las empresas socias de CARBIO se encuentran analizando la posibilidad de iniciar acciones administrativas en España como así también acciones conjuntas con el Gobierno argentino ante la OMC.
Redacción ON24
