La tecnología utilizada para “dar vida” a los juguetes toma el nombre de Toy Talk. Su objetivo es revolucionar la forma en que los más pequeños se relacionan con sus muñecos favoritos.
El inventor de esta gran idea fue Oren Jacob: creó Toy Talk, una tecnología muy parecida a lo que existe hoy en muchos sistemas operativos móviles, la de un asistente virtual (tal como Siri o Google Now).
La idea principal es que el niño vea que frecuentemente sus padres utilizan el asistente de voz en sus teléfonos, entonces, que ellos puedan hacerlo también. Toy Talk integra el uso del lenguaje en el desarrollo de los pequeños mediante juegos y actúa como un mediador entre el niño, sus fantasías y sus necesidades reales como persona. Todo esto ocurre gracias a una tecnología propia denominada PullString, que se vale en el trato personalizado que los niños le den a sus juguetes, lo cual hará que ellos mejoren su rendimiento y aprendizaje.
Además, los desarrolladores de PullString tuvieron que adaptar el sistema de reconocimiento de voz a los requisitos sonoros de las voces y pronunciaciones mas habituales de los mas pequeños. Es decir, si un niño dice “hoy toi feli”, el sistema debe reconocer que realmente quiere decir “hoy estoy feliz”. A partir de allí se reconocerán diálogos, chistes, canciones o rimas que el niño recite y se enviarán a los servidores de ToyTalk. Una vez ahí, “la nube” de Toy Talk escogerá las frases mas adecuadas ya creadas y grabadas por la empresa previamente para formar una conversación coherente con el niño.
El objetivo de ToyTalk, además de entretener a los más pequeños, es el de ayudarles a mantener conversaciones, desarrollar su forma de expresarse o construir frases y aumentar su vocabulario, todo ello en un ambiente de juego que hace más fácil esta interacción.
Por supuesto, los primeros avances fuera de una aplicación de ToyTalk tampoco se han hecho esperar y Hello Barbie se ha convertido en la primera muñeca interactiva del mundo, que usa precisamente esta tecnología.
ToyTalk aclara, ante posibles polémicas, que todas esas grabaciones de voz necesarias para que sus aplicaciones funcionen simplemente se usan con el fin de enviarlas a sus servidores para poder construir una respuesta, nunca se usarían con fines publicitarios. Es más, los propios padres deben autorizar el uso de las aplicaciones de ToyTalk con sus hijos antes de que éstos las usen, por lo que la supervisión es total en todo momento. Por supuesto, el nivel de polémica puede aumentar o decrecer, de forma proporcional, según el nivel de popularidad de estos nuevos y más que posibles nuevos acompañantes de juegos de los niños del futuro.