Las conversiones se mantienen estables y permiten que los talleres trabajen sin sobresaltos. Bajó el nivel de instalaciones respecto de 2014, pero hay buenas expectativas para los próximos meses. En todos los escenarios posibles, el gas continuará siendo la opción más económica, según un informe del sitio Surtidores:
En total, los talleres de GNC instalados en nuestro país están en condiciones de colocar entre 26 y 30 mil equipos por mes. Este es la capacidad de producción de la industria, por lo que actualmente se utiliza aproximadamente el 60 por ciento de este potencial.
Hugo Lamy, presidente de la Cámara Argentina de Productores de Equipos de Gas (CAPEC) explica que para el contexto actual este nivel de operatividad se ajusta a las necesidades de las empresas del sector. “Por debajo de las 13 mil conversiones hay problemas, por falta de trabajo, pero cuando suben mucho de golpe también genera inconvenientes”, señala.
El empresario explica los motivos: “en estos valores los talleres tienen mercadería fluida y nadie sufre de problemas de abastecimiento; cuando crece el negocio aparecen demoras de las entregas de cilindros, como pasó el año pasado, porque la producción local no alcanza para cubrir toda la demanda”.
Los productores necesitan comprar los insumos con seis meses de anticipación, lo que obliga a realizar las previsiones a principios de año, tarea que Lamy asegura no es nada sencilla: “a veces uno solicita de menos y otras sobra”. A la hora de realizar estos pedidos, se analizan las perspectivas de los aumentos de precios de los combustibles líquidos. Este año avanzaron, pero a un ritmo más lento.
En tanto, cuando los automovilistas compran repentinamente kits de inyección, en momento que el bolsillo aprieta, las Pymes se ven obligadas a contratar empleados, solicitar horas extras por parte del personal y a la vez adquirir más insumos a los proveedores.
En definitiva, exige una readecuación de los recursos y de los horarios de trabajo. Mientras más stock hay en los depósitos, y liquidez en la cuenta corriente del banco, menos se sufren estas variaciones y es posible aprovechar los movimientos del consumo.
Para los próximos años, Lamy es claramente optimista. No observa grandes sobresaltos, pero reconoce que habrá un mayor interés por el GNC, por parte de los usuarios, como consecuencia de los avances tecnológicos, que permiten ampliar el abanico de clientes. Los equipos de quinta generación captaron la atención de los autos modernos, recién salidos de fábrica.