Tras el decreto del gobierno nacional que estableció la Emergencia Hídrica por 180 días para la cuenca del Paraná, que involucra a la provincia de Santa Fe, el presidente de Aguas Santafesinas S.A., Hugo Morzán, anunció que el ente garantizará 170 millones de pesos más para abastecer el servicio a los domicilios, reconoció que puede haber desgastes especiales en las maquinarias de bombeo y pérdidas, y llamó a la población a no derrochar agua.
“No sabemos cuál es el límite de esta situación; las previsiones de quienes tienen la expertise indican que, a partir de septiembre, con el comienzo de las lluvias en la cuenca del Plata, debería comenzar la recuperación de los niveles, aunque todo indica que vamos a llegar al verano con bajos niveles de río aún”, señaló Morzán. “Esto hace necesario que tomemos conciencia y seamos solidarios, no tiene justificación barrer la vereda con la manguera, podemos hacerlo con un balde y una escoba para ahorrar 500 litros agua en cada vereda. No derrochemos agua”, pidió.
Si bien aseguró que el agua que llega a los hogares “es potable y puede beberse”, admitió que “es verdad que tenemos redes que son muy antiguas y que, producto de las bajas temperaturas, los caños sufren rajaduras y producen pérdidas”. En ese sentido, remarcó: “Estamos haciendo todo lo posible para que no haya disminución en la presión del servicio”.
“Desde febrero del año pasado, venimos trabajando en un estrés mecánico importante dentro de todo lo que es la estructura para sostener el servicio, con lo cual necesitamos que la gente acompañe este esfuerzo que se viene haciendo desde el Estado provincial (…) Estas situaciones generan desgastes especiales en las maquinarias, pero estamos previendo el equipamiento necesario para tener alternativas ante algún inconveniente, con bombas de 3.000 y 5.000 metros cúbicos por hora”, subrayó.
Así, recalcó que el año pasado, “superamos los 130 millones de pesos en inversión, asistidos por el gobierno provincial”, y expresó que “hoy tenemos garantizados 170 millones más, avizorando valores del río próximos al metro negativo”. Además, dijo que, en caso de ser necesario, a partir del decreto nacional, ASSA recurrirá “a algún grado de financiamiento”.
Por otra parte, Morzán explicó que el decreto nacional no solamente incluye a las actividades que tienen que ver con las tomas de agua de superficie del río y sus afluentes, sino también a la navegación y puertos.
A su vez, recordó que la semana pasada, la ministra de Infraestructura, Silvina Frana, llevó adelante una resolución que conformó un Consejo de Coordinación por la bajante del río “con la idea de poder hacer un trabajo conjunto para llevar adelante soluciones ante esta situación que es atípica pero que tiene algún reflejo con lo que sucedió en 1944, con el agravante de que es en pandemia y que lleva ya más de un año y medio”. Concretamente, el presidente de ASSA informó que se vienen monitoreando las 7 tomas que sobre el Paraná y realizando estudios de profundidades en cada canal de captación.
“Acá en Rosario agregamos un pontón flotante sobre el que colocamos bombas, suplementando la pérdida de rendimiento que tienen las bombas que normalmente llevan adelante esta tarea. La idea es que en los próximos días agreguemos dos bombas más y cambiar una de las 8 bombas que hoy tenemos, de las cuales 3 son nuevas, para asegurar aún más la captación de agua cruda y sostener la potabilización”, ponderó.
REDACCIÓN ON24