El informe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de la Argentina indica que la leche entera en sachet, arroja un precio promedio de $67. De ese monto, el tambo representa $24 (35%), la industria $22 (33%), el comercio $4 (6%) y los impuestos $18 (26%). El maíz representa el 18,4% del precio de la leche cruda (tambo) y el 6,6% del precio final del sachet.
Del precio final pagado por el consumidor, el 89,2% son costos, el 26% impuestos y -15,2% son pérdidas de la cadena. De esos impuestos, el 78% son nacionales, mientras que el 18% provinciales y 4% municipales. El IVA representa el 67% de los impuestos.
Cabe una aclaración especial respecto al IVA. “Los consumidores pagan el 21% de IVA sobre la leche, cuando debería estar exenta por ley. El problema está en que la ley contempla exenta la leche pasteurizada, producto que casi no se produce ni consume. En cambio, la leche que sí se produce y consume actualmente es la ultrapasteurizada, razón por la cual no queda exenta”, aclara Miazzo. “En un contexto donde el 42% de la población es pobre y el 57% de los chicos menores de 15 años también lo son, debería ser fundamental mejorar el acceso a alimentos de primera necesidad con políticas que no generen distorsiones en el sistema productivo y sea coherente con el tratamiento de otros alimentos, tomando como ejemplo, la carne y pan tienen alícuota reducida del 10,5%”, reflexiona el economista.
El precio de la leche, paso a paso: el productor del tambo vendió a $24,2 el litro de leche. La industria la adquiere a ese precio y suma $20,39 de costos y $2,06 de impuestos por litro. Con un resultado de $1,94, el precio del sachet sale de la planta a $48,59. El comercio la compra y suma $14,02 de costos de estructura, transporte y costos laborales, paga impuestos por $3,25 y obtiene una pérdida de -$10,24. Finalmente, se suma el IVA que paga el consumidor por $11,68 y se obtiene el precio final en góndola de $67,31. La leche perdió frente a la inflación y el dólar.
“Cuando se analiza el sachet de leche, se observa que la cadena se enfrenta a una situación crítica en todos los eslabones: tambo, industria y comercio, con precios que no alcanzan a cubrir costos (tambo), precios de venta contenidos, ocasionando un desfasaje con los costos (industria y comercio) y generando pérdidas económicas en casi todos los eslabones de la cadena, acentuado aún más en la etapa final”, comenta Ariño”. En el último eslabón, dependerá de la estrategia que persiga el comercio para compensar la pérdida por leche con otros productos lácteos con mejores márgenes.