Ser el primero en la Fórmula 1 no es fácil. Allí los mejores ponen la última tecnología disponible para ganar la carrera. En la genética maicera no es demasiado distinto. En este caso, las empresas semilleras ponen “sobre el terreno” sus mejores innovaciones. Por eso, el destacado comportamiento y la alta performance del híbrido AX 7822 de Nidera viene marcando un punto de inflexión en la producción de maíz.
“Se trata de un híbrido templado que se destaca por su potencial genético y sus características agronómicas –explica Claudio Pastor, gerente del Servicio Técnico de la Región Central de Nidera-, con muy buena caña y un excelente comportamiento sanitario en el que se destaca su tolerancia al tizón”.
“Estas son las características por las que aparece liderando los rendimientos en las principales regiones maiceras del país –agrega- y esta campaña llega a los productores en dos nuevas versiones, Triple Pro y Víptera, que se suman a los tres eventos con los que ya estaba disponible, TD Max, TD/TG y HCL MG”.
Entre las cualidades agronómicas a las que hace referencia el técnico de Nidera aparece la altura media de la planta, una inserción baja de la espiga y un tallo fuerte que minimizan los riesgos de quebrado y vuelco. Además, el AX 7822 no presenta problemas con el fenómeno fisiológico conocido como Green Snap, que provoca el quebrado en verde del tallo del maíz. Esto suele ocurrir por efecto de vientos fuertes en la fase vegetativa de cultivos que por buenas condiciones de temperatura y humedad han tenido un crecimiento rápido y las plantas no llegaron a lignificarse. Precisamente, la ventaja del AX 7822 es que presenta una rápida lignificación de sus tallos.
Además, el buen tamaño de sus hojas, sumado a su vigor inicial, le permite una muy buena cobertura del entresurco. La característica flex de su espiga hace que compense las densidades de siembra con su tamaño. “Por lo tanto, nuestra recomendación es no excederse en la densidad de siembra, sobre todo en años que pueden presentar menores lluvias a las normales”. Al respecto, Pastor indica que para los ambientes de menor productividad, del orden de los 6 a 7.000 kilos por hectárea, se recomienda que la densidad apunte a las 55 a 60 mil plantas por hectárea. Mientras que si las condiciones de producción permiten aspirar a rendimientos de 8 a 10.000 kg/ha la densidad recomendad sube a las 70 mil plantas logradas y en lotes con condiciones que permitan obtener más de 10.000 kg/ha se recomiendan 75.000 plantas logradas por hectárea. “En los casos de ambientes de muy alta productividad y con riego, en los que se buscan rindes de 14.000 kilos por hectárea o más, entonces recomendamos llegar a las 80 a 85 mil plantas por hectárea”.
Aunque por su ciclo el AX 7822 se adapta perfectamente a toda la zona núcleo maicera, este híbrido de Nidera ha mostrado excelentes rendimientos en el sur de Santa Fe, en Entre Ríos y en toda la provincia de Córdoba. “Su excelente tolerancia a enfermedades le ha permitido destacarse aún en el norte de Córdoba, donde los problemas por ataques de tizón son importantes”, explica Pastor.