Edgardo Geminelli, titular de la fábrica de plásticos y matrices Gemplast consumida por un voraz incendio en abril, habló con ON24 e indicó que aún se encuentra a la espera de los fondos de Provincia y Nación para comprar maquinaria en el exterior que le permita reflotar gran parte de su producción, la cual es demandada “desesperadamente”.
¿Cuál es la situación hoy respecto a los fondos que aseguraron tanto el gobierno provincial como el nacional para comprar maquinaria?
Estamos preocupados porque la Provincia nos prometió algo que no se está dando, aparentemente, por problemas de presupuesto. Nos dicen “contá con ello”, pero no se pueden girar para que las máquinas se comiencen a construir. Las máquinas hay que encargarlas, son seis inyectoras. A mí no me dan la plata, sino que la giran al fabricante directamente.
¿Te hablaron de tiempos?
No, pero me dijeron que ya estaba pronto. Es un “ya está” de casi todos los días. Hay muy buena predisposición, pero no tenemos el comprobante.
¿Te volviste a reunir con funcionarios de la Gobernación?
No, estuve charlando sí y me comentaron que es un tema de trámites internos de ellos. Está todo bárbaro, pero si seguimos así, es un problema. Hasta ahora, estamos con promesas. De los únicos que tengo hechos concretos es de los empresarios, de proveedores y amigos.
¿Qué sucede con los clientes de la firma en este contexto?
Algunos tienen un problema terrible porque no tienen a dónde recurrir. Nosotros, por ejemplo, en proveer inyección para helados teníamos cerca de un 70% del mercado nacional. El cliente está desesperado. No es que no tenés una marca de azúcar y vas a comprar otra. Nosotros estamos generando, sin voluntad, un problema complejo en el país. Nuestros clientes están esperando que nosotros salgamos al mercado. Por eso es que tenemos asegurada la continuidad en tanto y en cuanto tengamos las máquinas.
Y mientras… ¿cómo se solventan?
Mientras, lo que hacemos para hacer caja es importar productos elaborados de países cercanos y los vendemos usando nuestra cadena de distribución. Generamos caja para pagar los gastos. Esos productos, sobre todo de bazar, los vendemos hasta que los empecemos a fabricar nuevamente nosotros.
¿Les liberan las DJAI?
Sí, sí, no tengo problema. El gobierno, en ese aspecto, se está portando muy bien con nosotros, está atendiendo a la realidad. Las DJAI de estas máquinas que estamos esperando ya están aprobadas. Presentamos las DJAI y a los dos días ya están aprobadas.
EL APURO
La empresa perdió 68 máquinas en el incendio a fines de abril. De ese total, en promedio, indicó Geminelli, trabajaban unas 35. Desde hace unas semanas, la fábrica logró volver a funcionar, en galpones que no fueron consumidos por el fuego, con 12 máquinas tercerizadas, más una otorgada por un proveedor a pagar a partir de 2016 y dos más que se “salvaron del siniestro” pero que necesitan reparaciones.
Con los fondos de Nación y Provincia, Geminelli se haría de una flota de 18 máquinas nuevas, lo que le permitiría no sólo engranar una producción mayor, sino ir sumando parte del personal afectado (eran 340 empleados). “Por eso es el apuro a tener las máquinas, porque en cada una de ellas trabajan tres personas. Entonces, es un círculo virtuoso”, señaló su titular.
Una vez realizadas las transferencias, las máquinas, procedentes de China y Alemania, se embarcarían en 45 días, lo que supone un tiempo récord, ya que en promedio demoran entre 90 y 120 días.
Cabe señalar que las pérdidas del incendio se estiman entre US$ 30 y 40 millones, teniendo en cuenta construcción y maquinaria.
Para volver al ruedo, tras las llamas, Geminelli destaca una y otra vez la ayuda que está recibiendo de parte de privados: “Una empresa importante de Rosario nos dio un torno, sin ningún tipo de firma, como así también un montón de gente nos está ayudando con bombas, material de papelería, balanzas. También ayuda de empresas de construcción, de los proveedores de materias primas, es decir, la sociedad no me permite que yo mire para atrás. La ayuda y el empuje que tengo de todos no se pueden describir.
Respecto algunos trascendidos de prensa señalan que la empresa no tenía seguro, Geminelli aclaró: “Teníamos un porcentaje importante, pero eso no se cobra en cinco minutos (…) Será invertido también en bienes de capital”.
REDACCIÓN ON24