De acuerdo al reciente informe del GEA de la Bolsa de Comercio de Rosario, es extremadamente variable la situación de la soja, tal como muestra la reserva de agua útil para soja de primera al 24 de febrero. El este de Córdoba y la franja este de Santa Fe están muy bien. Allí, pese a la tremenda falta de agua de febrero, la soja está necesitando tan solo entre 10 a 40 mm.
Las sojas más afectadas están en el extremo sur y la franja oeste de Santa Fe y en el norte Buenos Aires, en especial el oeste. Allí, la necesidad de agua del cultivo trepa de los 40 a los 100 mm. La condición del cultivo en la región núcleo muestra que un 40% del área está en condición excelente a muy buena, un 30% regular a malo y en medio, un 30% que por ahora está bueno pero con muchas dudas.
Al respecto de los lotes buenos (70% del área) en Pergamino, los técnicos dicen que “están bien, la condición varía mucho según la calidad de cada lote, rotaciones, manejo, cantidad de lluvias que recibieron.
Están aguantando bien, en pleno llenado, ¿Pero cuál que va a ser el impacto? No se puede saber, con 10 días por delante sin agua… Súmale trips, arañuela y bolillera. Hay una gran incertidumbre”. En la franja del oeste de Santa Fe un agrónomo que recorría hoy la zona, decía: “la soja en campos buenos ha perdido un 10% de su potencial. En campos intermedios un 20 a 25%. En campos regulares un 40 a 50%. Esto es hoy (25/2), hay que ver cómo llegan al día de la próxima lluvia”. En General Pinto, ya hay casos donde estiman pérdidas del 50%. “Pero todo es muy variable según cada lote”, concluyen.