De confirmarse las estimaciones de la firma alemana Oil World para la campaña que está finalizando (ciclo 2014/2015), la producción mundial de semillas oleaginosas estaría traspasando el techo anual de las 500 millones de toneladas, alcanzando un registro de 523,3 millones de tn. Esta cifra es un 17% más alta que la producción global anual verificada en la campaña 2011/2012, tres años atrás, la cual había ascendido a 445,8 millones de tn.
El fuerte crecimiento en la cosecha mundial de semillas oleaginosas ha sido traccionado por el gran aumento en la producción de poroto de soja. Según Oil World en la campaña 2014/2015 esta última estaría ubicándose en una cifra cercana a las 312 millones de toneladas, en tanto que en el ciclo 2011/2012 había sido de 241,6 millones de tn. El incremento interanual en este producto entre la 2014/2015 y la 2011/2012 – es del 29%, con casi 70 millones de toneladas anuales adicionales respecto del 2011/2012. Esto significa que el mundo produce hoy 70 millones de tn. de poroto más que hace tres años. Esta cifra es similar a las compras de China de todo un año, las cuales ascienden a 71 millones.
Los indicadores citados y otros factores adicionales nos dan la pauta de porque se ha producido una gran caída en los precios internacionales del poroto de soja desde mediados del año pasado en el mercado de Chicago. Hay una holgada cosecha de los principales países productores que ha hecho crecer los stocks finales de poroto, como veremos más adelante.
Pero analicemos el cuadro N°1 donde hemos consignado la producción mundial de semillas oleaginosas desagregando la información por tipo de producto. Cuando hablamos de semillas oleaginosas nos estamos refiriendo a las siguientes: soja, girasol, colza canola, algodón, maní, copra (pulpa seca del coco), lino, sésamo, semilla de palma y ricino. De ese cuadro podemos arribar a las siguientes conclusiones:
” La producción mundial de semillas oleaginosas viene creciendo de manera paulatina en las últimas cuatro campañas, sin registrar caídas anuales en este período. Lo mismo sucede con el poroto de soja.
* El producto más relevante es la soja, quien tiene una participación del 60% en el total de la producción mundial de semillas oleaginosas. Le sigue la colza, con un porcentaje muy inferior del 13% y luego el algodón (9%).
* En la medición puntual de producción entre las campañas 2014/2015 y 2011/2012 ningún producto ha registrado el crecimiento interanual que ha tenido la soja. Esta creció, como comentamos anteriormente, un 29% en su producción, superando a la suma de todas las semillas oleaginosas (17%). Atrás quedó la almendra de palma con un 15% y la colza con un 11%.
* De estas apreciaciones, se infiere que ha sido la soja el causante principal del crecimiento ininterrumpido de la producción mundial de semillas oleaginosas.
El cuadro N°2 nos permite evaluar a los principales países productores de semillas oleaginosas y su performance en las últimas cuatro campañas.
Los principales países productores de semillas oleaginosas en este período fueron los Estados Unidos de América, Brasil, Argentina y China. USA ha sido el líder con una producción anual estimada de 116 millones de toneladas en la campaña 2014/2015. Le sigue Brasil con 97 millones y Argentina con 59 millones.
Argentina en la campaña 2012/2013 era superada por la República Popular China ubicándose en el cuarto lugar. Pero merced a las excelentes campañas sojeras de los últimos dos años, nuestro país superó al Gigante Asiático con una clara diferencia en el ciclo 2014/2015: 59,1 millones de toneladas para Argentina contra 48 millones de toneladas de China. Notemos que las estimaciones de Oil World de Marzo de 2015 no registran los últimos aumentos en las estimaciones locales de producción de poroto de soja. Según la consultora alemana la producción argentina rondaría las 55 millones de toneladas en tanto que nuestro Departamento Guía Estratégica para el Agro (GEA-BCR) en su último informe ubicó el resultado de la cosecha argentina en los 59 millones de tn. Con esta diferencia entre ambos países, parecería estar consolidándose el nuevo posicionamiento de nuestro país en el tercer lugar en el concierto de las naciones productoras.
Resulta interesante observar el cuadro Nº3 donde se detalla la información acerca de cómo está compuesta la producción de semillas oleaginosas en los principales países productores. Este rasgo lo habíamos comentado en un informe anterior de nuestro Boletín. Tanto Estados Unidos de América como Argentina y Brasil comparten un rasgo en común que no lo tiene la producción de la República Popular China. En estos tres países la soja ocupa un papel relevante y central en el total de la producción de semillas oleaginosas. Para la campaña 2014/2015, USA registró una producción total de 116 millones de toneladas de semillas oleaginosas, con una participación central de la soja que alcanzó un total de 108 millones. La semilla que ocupó el segundo lugar fue el algodón que apenas registró una producción de 4,8 millones de toneladas. Brasil presenta el mismo fenómeno. De un total de 97 millones de toneladas de producción de semillas oleaginosas, la soja registró 94 millones. Argentina también: de una cosecha total de semillas oleaginosas de 59 millones, 55 sería de soja y apenas 2,8 millones de toneladas, girasol.
En cambio China presenta una distribución por producto más pareja y equilibrada. Su producción de semillas oleaginosas está repartida entre soja, colza, algodón y maní, con registros de producción que oscilan entre los 10 y 12 millones de toneladas anuales, respectivamente.
El fuerte aumento en la producción mundial de semillas oleaginosas ha generado un significativo aumento en el stock mundial final de semillas, el cual puede observarse claramente en el cuadro Nº4 titulado “Balance de Oferta y Demanda Mundial de semillas oleaginosas”. La producción mundial de semillas oleaginosas en su comparación interanual entre los ciclos 2011/2012 y 2014/2015 ha aumentado un 17%, en tanto que los consumos mundiales a apenas se elevaron un 7%. La producción crece más que el consumo. El stock final mundial era de 67,4 millones de toneladas en la campaña 2011/2012, en tanto que el cierre del actual ciclo (2014/2015) podría estar mostrando un stock final de 100,8 millones de tn. El aumento en el stock final global es notable: 50% entre ambas campañas.
Miremos ahora a la soja. El Balance de oferta y demanda mundial de poroto de soja muestra aún mayores incrementos en el stock final que el total de las semillas oleaginosas (Ver cuadro Nº5). Allí puede verse que en el ciclo 2011/2012, el stock final mundial ascendía a 54,66 millones de t. En la 2014/2015, el stock final podría llegar a 87,7 millones. El incremento entre año y año del stock final mundial es elevadísimo: ascendería al 60%.
Muchos especialistas, cuando analizan la fuerte baja del precio del poroto de soja en los últimos meses, sostienen que hay que mirar más los stocks finales de los Estados Unidos que los mundiales, ya que el mercado de futuros de Chicago -el que establece los precios de referencia para todo el complejo sojero- se ve más influenciado por la realidad local estadounidense que por la mundial. Y eso fue lo que hicimos en el cuadro Nº 6 que explicita el Balance de Oferta y Demanda de poroto de soja en USA. Entre 2011/2012 y la última campaña 2014/2015 la producción norteamericana pasó de 84 millones de toneladas a 108 millones. El aumento fue importante: del 28%. Pero el crushing de soja local apenas aumentó un 5% entre estos años: pasó de 46,3 millones de toneladas a 48,8 millones de tn. En tanto que las exportaciones de poroto estadounidense (especialmente a China) respondieron positivamente con un aumento del 31%. Esto significa que el aumento en la producción estadounidense se dirigió principalmente a la exportación, y en muy menor medida a la molienda local que genera harina y aceite de soja para el mercado doméstico y las ventas al exterior.
¿Qué sucedió entonces con los stocks finales estadounidenses de poroto de soja? La respuesta es la siguiente: aumentaron en porcentajes el doble del aumento en el stock final mundial. Entre 2011/2012 y 2014/2015 el stock final de USA pasó de 4,6 millones de toneladas a 10 millones. Esto significa un incremento interanual del 118%. El mundial estaría registrando un aumento del 60% como vimos antes.
En síntesis, más producción mundial y estadounidense de poroto de soja, consumos mundiales con crecimientos menores a la producción y mayores stocks finales en el Globo terráqueo y en Estados Unidos no pueden dar un escenario muy distinto al que estuvimos viendo: una fuerte caída en los precios del complejo sojero, fuente principal de los ingresos de divisas de nuestro país.
Autor: Julio Calzada – BCR