La Clínica Mayo en Estados Unidos plantea que la mejor forma de tratar el estrés y sus padecimientos es conociéndolos y teniendo los datos suficientes para atacar el problema. Constantes dolores de cabeza, insomnio, ansiedad, son algunos síntomas relacionados a esta condición y mientras antes detectarlos podía requerir de conciencia y mucha observación, ahora equipos como los relojes inteligentes representan una opción para resolver el problema.
Si bien existen varios relojes inteligentes en el mercado, la mayoría de ellos se enfocan en medir el rendimiento de actividad física, otros son solo una extensión del smartphone pero existen algunas opciones en el mercado dedicadas a la salud, uno de ellos es Fitbit Sense, el más reciente gadget de la marca que Google adquirió a finales de 2019.
Sense cuenta con todas las funciones convencionales de un smartwatch: recibe notificaciones, permite contestar llamadas, contar tus pasos- como lo hacían inicialmente las bandas inteligentes de la marca- pero a diferencia de otros equipos este se enfoca mucho en el monitoreo de salud, de dos formas: medición y manejo del estrés y monitoreo profundo del sueño.
Sensores contra el estrés
El sensor denominado EDA (Electrodermal Activity) es el principal encargado de que Sense te permita conocer tus niveles de estrés. El sensor de temperatura cutánea puede conocer las variaciones en tu sistema nervioso simpático y saber si estás generando reacciones de estrés, esto aunado a un sensor que mide el ritmo cardíaco permite dar una evaluación ante estos problemas.
La forma más sencilla de medir el estrés con Sense es por medio de un diagnóstico rápido de dos minutos, en el que debes colocar la palma de la mano sobre la carátula del reloj y respirar profundamente. Esto intentará bajar la lectura de respiraciones por minuto y relajarte. En mi caso funcionó, aunque las primeras veces sentí que dos minutos duraban una hora entera.
Estas respiraciones pueden ayudarte a dormir mejor o relajarte en momentos clave; sin embargo, si se trata de algo más profundo el reloj cuenta con meditaciones guiadas de entre 20 y 60 minutos que puedes activar desde el reloj.
Rutina de mindfulness
Para una persona que no duerme tan bien, tiene horarios variables y que le cuesta mucho permanecer quieta hasta durante dos minutos, un reloj así, enfocado en la calma parecía más receta médica que disfrute; sin embargo, eso fue solo al inicio.
Si bien no es el reloj que recomendaría por usabilidad, aunque sus sensores de medición en entrenamiento son un poco más acertados por ejemplo que un Galaxy Watch 2, al probar por algunos días las rutinas de respiraciones o tener información muy detallada de los ciclos de sueño en la app de Fitbit, al menos la curiosidad de conocer más, siento que creó cierto reto personal de querer mejorar las estadísticas.
En la app de Fitbit puedes configurar los horarios de sueño y ver los ciclos, además de ver las variaciones de frecuencia cardiaca al dormir y recibir tips para mejorar el descanso, pues cada día el reloj califica tu sueño.
Al final de una semana logré mantener una puntuación alrededor de 62 a 65, que se registra como aceptable.
Todo esto fue con la app en un modo básico y gratuito, pero hay un modo premium que puede probarse gratis por seis meses, si el usuario lo requiere.
Si bien mantener el estrés a bajo control va mucho más allá de usar un gadget y checar las puntuaciones de tus actos, Sense es una buena opción para crear un historial de mindfulness y plantear metas para mejorar la capacidad de relajarse de forma cotidiana.
El reloj Fitbit Sense ya está disponible en el mercado mexicano y su precio es de 9,499 pesos.