Presencia regional, apoyo a las empresas ante la crisis y trabajo en conjunto con la Secretaría de Producción, son tres de los pilares en lo que se apoyará la nueva gestión del Banco Municipal de Rosario (BMR).
Así lo describió el flamante presidente del directorio, Adrián Giacchino, que en un mano a mano con ON24 habló de todos los temas, en un inicio de gestión marcado por una crisis de inusitadas características.
¿Qué banco te encontrás?
Requiere dos análisis, al Balance General 31/12/2019 y cuando tengamos el Semestral que nos llegue al 30/06/20.
El cierre de 2019 muestra buenos números, apoyado en la rentabilidad extraordinaria que proveyeron las Leliqs, tanto ese año como en los anteriores. El 2020 que transcurre se está dando en un marco distinto, en primer lugar, por aspectos relacionados con el cambio en la política monetaria del gobierno, con fuerte baja en la tasa de deuda remunerada del BCRA. También por la necesidad de asistencias crediticias a tasas activas más bajas para atender las dificultades que nos trajo la pandemia. Por ejemplo los préstamos a tasa 0 y los otorgados al 24% a PyMEs.
En cuanto a la situación actual, lo veremos cuando esté disponible el Semestral a Junio, para lo cual será oportuno revisar la evolución de los indicadores teniendo en cuenta el incremento del riesgo en liquidez, capital – se requiere para crecer en volumen y negocios – rentabilidad y evolución de tasas activas y pasivas, para definir la tasa de equilibrio de la entidad.
Con este contexto, la receta es múltiple, crecer en negocios y servicios, desarrollar programas de financiamiento adecuados, y austeridad en los gastos.
¿Cuáles son los principales objetivos de tu gestión?
Los que corresponden a una banca pública municipal, será instalar una mayor presencia regional con el foco puesto en el apoyo a las pymes comerciales y productivas, profundizar la Inclusión financiera que se está desarrollando, y el desarrollo de programas que fomenten al emprendedor, las acciones sobre el territorio, los barrios, es la demanda que vendrán por estos tiempos y tomadas en distintos ámbito donde se nos solicitó mayor intensidad en estos requerimientos.
¿Tuviste algún pedido expreso de Pablo Javkin respecto al perfil que debe tener el BMR?
Este Banco es de la ciudad y por lo tanto su rol es avanzar en la solución de los principales temas vinculados y ofrecer productos financieros pensados y aplicables a la economía y clientes de la ciudad y zonas de influencia y en los lugares externos donde existen sucursales. Es un banco de proximidad y proclive a armar productos o líneas flexibles y siempre adaptadas a las necesidades del empresariado y personas y familias en un marco de cercanía.
También desarrollar una gestión conjunta con la Secretaria de Producción y Empleo. Estamos en contacto con Sebastián Chale y su equipo para enfocarnos en lo que viene, no sé si llamarlo reconstrucción económica, pero será complejo.
Nos proponemos simplificar líneas, instrumentos y poder continuar o potenciar lo que son líneas con subsidios de tasas, para relanzarlas. Este instrumento – hablo del subsidio de tasa a través de la Secretaría o de la Provincia – lo considero fundamental para esta etapa, volviendo a la nueva normalidad. Lo trabajé mucho en mi gestión en BICE, permite asignar partidas donde más se necesita y genera valor. También lo hizo Sebastián (Chale) en su anterior paso por la Secretaria. Por eso lo decimos con conocimiento y convicción. Es uno de los instrumentos más virtuosos que buscaremos optimizar, para comercio e industria, es una línea de trabajo central
Atentos al difícil momento que atraviesan las empresas de la ciudad y la región, qué capacidad tiene el BMR para ser un actor crediticio de relevancia. ¿Será una política que buscarás sostener?
El Banco ha mantenido durante años un nivel de cumplimiento muy alto teniendo permanentemente índices de morosidad menores a la media del Sistema. Lo que pueda ocurrir en la salida de esta situación de pandemia es imposible de prever, no obstante el BMR hará todos los esfuerzos que estén a su alcance para apoyar a las empresas y familias a recomponer la compleja situación que se ha creado, entendiendo la situación como sistémica, siendo la pandemia la principal responsable en la coyuntura.
¿Qué tan importante es que Argentina resuelva el tema de la deuda para fortalecer el circuito financiero interno y el acceso al crédito internacional? En caso de que Argentina resuelva la deuda, ¿eso tendría algún impacto particular en el BMR?
En caso que la Argentina resuelva la deuda con legislación extranjera, pero muy en particular cuando se normalice la deuda bajo legislación Argentina, le permitirá al BMR ayudar a los emisores locales, a conseguir financiamiento de calidad para aumentar su producción o invertir en obras e infraestructura. La estructuración en cabeza de los emisores propios o de fideicomisos que se articulen para consumo, inversión, construcción, obras públicas o infraestructuras tendrán mejores oportunidades tanto en plazos, como tasas y montos y allí el BMR aspira estar activamente para colaborar en la recomposición del tejido económico.
¿Cuánto te preocupa una suba descontrolada de la inflación por la inyección monetaria masiva que encaró el gobierno? ¿Qué instrumentos te parecen viables para esterilizarla?
El problema de la inflación monetaria, que hoy se advierte como un problema de esterilización, será a medida que comience a normalizarse la economía un problema de cómo volcar esos pesos en exceso emitidos durante la cuarentena hacia los sectores productivos de bienes y servicios, de forma tal que permita despertar rápidamente la oferta de bienes de la economía. Ese será el verdadero antídoto para que no exista un rebrote inflacionario.
En el plano financiero, habrá que mirar cómo el BCRA maneja tanto la tasa de interés de referencia así como los depósitos actualizables en pesos, como manera de custodiarles el valor de los ahorros a las personas. Allí la autoridad monetaria tiene herramientas mediante encajes diferenciales para promover mejores aplicaciones a esos ahorros y que se transformen en más bienes, más servicios y por lo tanto en más empleo.
¿Qué respondes a las críticas que se te hacen por haber sido Director del BNA en el marco del tema Vicentín? ¿Qué responsabilidad crees que tuvo el BNA en el caso?
Primero debo aclarar que fui Director en BNA entre Abril 2017 y Noviembre 2018, es decir períodos anteriores a la situación de público conocimiento sobre la relación BNA-Vicentin.
Durante el período en que fui Director la situación de Vicentin fue absolutamente normal y dentro de los parámetros fijados por la normativa, incluso el último balance que presentó la empresa durante mi estadía (recuerdo que fue al 30.10.17) tenía la máxima calificación interna de la línea Gerencial del Banco, era sólido y sin problemas a la vista. Es más, integrando la Comisión Integral de Riesgos instruí antes de irme, por divergencias con el Ministerio de Economía, un análisis de los Grandes Deudores del BNA, que incluía Vicentin, quien mantenía a esa fecha una buena perfomance en crecimiento, resultados e indicadores.
Es claro que los problemas sobrevinieron con posterioridad a mi función, no puedo hacerme cargo de las cosas que ocurrieron cuando no estuve y tampoco decisiones que no suscribi.
Desde luego y como santafesino me preocupa la situación de la empresa y cómo se llegó a esta instancia, y que encuentre una solución lo más rápido posible, dado el tiempo transcurrido, y favorable para todos quienes están vinculados.
¿Quienes te acompañarán en la gestión?
Me acompañan en el Directorio Patricia Cosgrove, Sebastián Azerrad y José Barraza, quien cogestiona activamente en su rol de Director Representante del personal, vamos a acordar decisiones conjuntas, con distribución de tareas y apostamos a la línea gerencial, a las cuales estamos transmitiendo las pautas que indique el Directorio y el Ejecutivo. También vamos a aportar a la Fundación, a quien le pediremos informes y trabajos que permitan activar la gestión del Banco. Está transcurriendo el ejercicio nro. 125, es un compromiso adicional.
REDACCIÓN ON24
