La Cámara de Gimnasios de Rosario y Litoral presentó ante la Municipalidad su propio protocolo para reabrir los locales en la ciudad, ya que, según sostienen, se encuentran en una situación crítica, debido a que con el aislamiento obligatorio han perdido la fuente principal de ingresos mientras las obligaciones y compromisos no se han suspendido.
“Los gimnasios de Rosario están en terapia intensiva con un respirador que se desconecta en cualquier momento, porque todos nuestros gastos siguen corriendo, las medidas del gobierno no alcanzan, y en la parte impositiva no ha habido medidas concretas aún”, expresó el directivo de la institución, Walter Pedemonte. “Somos 170 gimnasios en la Cámara y tenemos estimado que unas 3.000 personas dependen de nuestro negocio directa e indirectamente”, indicó.
El empresario señaló que el sector ha buscado diferentes medidas paliativas durante la cuarentena, pero aseguró que con ninguna de ellas alcanza para cubrir la estructura de costos. “Las clases virtuales hoy son más un servicio que una posibilidad de ingreso. En proporción a lo que recauda un gimnasio habitualmente, no llegan ni al 10%”, manifestó y agregó que, incluso, algunos gimnasios han tenido que alquilar su equipamiento. “Hoy el gimnasio no tiene ningún tipo de ingreso, exceptuando algo de clases virtuales”, remarcó y apuntó que aquellos que cuentan con membresías por varios meses “van a tener que ver con los socios cómo solucionan eso cuando puedan reabrir”.
“El gimnasio es un comercio de cercanía, por lo que la gente no tiene que usar transporte público ni recorrer grandes distancias. Y además, queremos que entiendan que el gimnasio no es un centro de recreación, sino un agente propagador de bienestar físico y emocional, donde mucha gente concurre por diversas patologías o lesiones”, resaltó Pedemonte.
ESPERAN EL OK
Para conformar el protocolo, la Cámara tuvo en cuenta tanto las recomendaciones que les brindaron los sanitaristas de la Municipalidad como también el que elaboró la entidad que los nuclea a nivel nacional, pero que, a juicio de Pedemonte, está más centrado en la realidad de las grandes cadenas de gimnasios, “que no es la misma que la del 90% de los gimnasios de Rosario”, explicó. “Ahora estamos a la expectativa de una respuesta”, señaló.
Entre las principales medidas de precaución que proponen para reanudar su actividad, el directivo de la institución local ponderó: trabajar con turnos previamente asignados, en función del espacio físico de cada local, estimando trabajar con una persona por cada 4 metros cuadrados para respetar el distanciamiento entre personas. Cada persona deberá desinfectar los elementos que haya utilizado, y entre cada turno se procederá a la limpieza general del lugar. Además, se dispondrán alfombras sanitizantes al ingreso y se prohibirá que puedan concurrir personas mayores de 65 años. También habrá estaciones con alcohol en gel y ventilación permanente, separación de las máquinas y uso obligatorio de barbijos.
REDACCIÓN ON24