Hoy por la mañana, el médico psiquiatra José Eduardo Abadi brindó una breve videoconferencia en exclusiva para Fundación Libertad. A lo largo de la misma, arrojó algunas luces sobre nuestros comportamientos y temores a lo largo de la cuarentena. Según explicó, la angustia de muerte y la nostalgia por el tiempo pasado y los afectos son algunas de las sensaciones más recurrentes. También apuntó la importancia de no obsesionarse con la construcción de rutinas y evitar vivir esta situación como si se tratara de una prisión o de un castigo.
De acuerdo con Abadi, la principal causa de ansiedad y angustia en la cuarentena es la falta de plazos claro. “Cuando dicen ‘transitorio’, nuestro inconsciente nos dice ‘no tiene fin'”, dijo. Por otro lado, advirtió que el término “aislamiento” puede tener una connotación negativa, más cercana a la prisión o castigo.
Este tipo de ansiedad puede profundizarse y comenzar a propiciar el desarrollo de sentimientos como la nostalgia y la melancolía. El temor a perder personas y la imposibilidad de ver a nuestros afectos pueden derivar en la angustia de muerte o en el duelo por pérdidas imaginarias. “Lo recomendable es mantenerse en el presente”, dijo.
Cuadros sostenidos de ansiedad y su crecimiento, pueden hacer que aparezcan ciertas dolencias. Según el psiquiatra, el cuerpo puede manifestar síntomas que van desde la taquicardia hasta problemas respiratorios y en el habla.
Abadi fue sumamente categórico acerca del acceso a la información. “Absolutamente no”, sentenció cuando fue consultado acerca de si creía que era positivo exponerse a noticias a toda hora. Según dijo, lo ideal sería encontrar un punto intermedio, seleccionar las buenas fuentes y evitar la saturación.
Abadi sostuvo en reiteradas oportunidades que la cuarentena nos ha puesto en una situación en la que ya no nos sentimos “en control”. El establecimiento de rutinas puede ser un comportamiento que puede hacer que retomemos la confianza. Sin embargo, aclaró que “tampoco es necesaria una programación que recuerde el servicio militar de otra época”.
Finalmente, el reconocido psiquiatra dejó dos reflexiones. La primera tiene que ver con el autoritarismo y la recomendación de “convertir órdenes en decisiones personales”; la segunda, con recuperar la noción de “comunidad”.