A pocas horas de la irrupción de la noticia sobre la situación crítica de Vicentín, en cada rincón del sector productivo de la región reina la tensión y la expectativa. Se sabe que una salida problemática del “estrés financiero” que argumentó la compañía podría generar un tsunami que arrastraría a buena parte de la cadena.
Si bien desde la empresa continúan manejando las negociaciones con hermetismo, ya se barajan algunas opciones. Entre las más potables figura la posibilidad de que el Banco Nación apruebe un crédito que, al menos, le permita levantar las deudas con productores y corredores (se calcula que hay una deuda con la cadena comercial de US$ 350 millones). Una solución que le daría aire en el corto plazo, tiempo para resolver el descalce financiero de fondo, pero que sobre todo serviría para contener la onda expansiva que marcaría un antes y un después en el corretaje fìsico de granos.
No obstante, el salvavidas que le podría lanzar el Nación está condicionado por la deuda que la compañía mantiene con la entidad, la cual, asciende a $18 mil millones, el equivalente al 78% del total su pasivo bancario.
Otro camino es esperar a que intervenga la política nacional. Aquí la coyuntura de transición no ayuda, dado que a días del recambio de gobierno nadie de la administración saliente puede comprometerse a nada, y de la entrante no están claros los interlocutores. A esto se refirió el flamante presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, Daniel Nasini, que el jueves ante un auditorio repleto de corredores preocupados, reconoció que todavía no hay una referencia nacional con la que se pueda hablar. “Lo que sabemos es lo que expresó Vicentín en el comunicado”, dijo el ejecutivo.
Entre las versiones que corrieron en las últimas horas también se contaba la posibilidad de que Vicentín venda parte de su negocio. Estos rumores se cayeron a pedazos con el correr de las horas.
Hasta ahora, lo cierto es que la empresa puso en stand by todas sus operaciones y que recién la próxima semana avance en alguna de las opciones que baraja.
REDACCIÓN ON24