El endurecimiento del cepo cambiario congeló la operatoria en Rosario. Luego de la primera jornada en la que el Banco Central dispuso achicar a un máximo de USD 200 mensuales para inversores minoristas, hubo muchas preguntas y pocas nueces.
Según Federico Grimblat, gerente de Carbatur, si bien hubo consultas, casi no hubo transacciones. “Hay un par de cuestiones: muchas personas se dolarizaron la semana pasada y estamos a fin de mes, con lo cual, hay poca liquidez. Habrá que esperar hasta principios de noviembre para ver si los inversores vuelven a volcarse al mercado de cambios”.
“De todas formas -agregó Grimblat- seguramente la semana que viene, cuando las medidas estén más internalizadas por nosotros y por la gente, tendremos un panorama más claro, pero seguramente la operatoria tenderá a caer”.
Por su parte, el analista Juan Carlos Carrizo coincidió en que fue una jornada tranquila, aunque volátil para bonos y acciones. “Todo el refuerzo del control de cambios plancha el dólar oficial y agita otras formas de dolarizarse. Creo que la semana pasada la gente se sobre dolarizó descontando que esta semana iba a ser muy complicada”, dijo a ON24.
Y siguió: “Hay que ver cómo las definiciones que se vayan tomado caen en el mercado y si se agranda la brecha entre las diferentes cotizaciones”.
En cuanto a las versiones que corrían en las horas previas de que el gobierno iba a endurecer las restricciones, Grimblat opinó que “a pesar de que se podía intuir que iba a haber un acortamiento de los montos, no lo veiamos asi de fuerte”. A lo que Carrizo agregó: “Era evidente, había dos alternativas: liberarlo o reforzar el control. Y por más que digan que es una medida hasta el 10 de diciembre, creo que va continuar”.
REDACCIÓN ON24
