A un mes y medio de la largada, el Peugeot 2008 DKR inicia su transformación y cambia su atuendo negro de carbono para adoptar su uniforme de carrera. Con esta metamorfosis ya están listos para tomar impulso y desafiar a las 4×4 en el rally raid más exigente del mundo.
A medida que se acerca el 4 de enero, el Peugeot 2008 DKR toma colores. Luego de siete meses de monocromía, la máquina elaborada minuciosamente por los ingenieros franceses cambia de aspecto y se atavía con un atuendo más distinguido: azul, rojo y blanco, símbolo de su inminente entrada en acción.
“¡Parece mucho más agresivo así!”, se entusiasma Cyril Despres, poco habituado a los efectos de estilo en una superficie de carrocería de este tipo. En cuanto a Stéphane Peterhansel, detecta rápidamente el encanto que ofrece este nuevo grafismo a las tripulaciones: « el hecho de que el habitáculo esté rodeado de blanco es una ventaja contra el calor. ¡Ya circulé con un techo negro y esto marca la diferencia! ».
Los miles de kilómetros recorridos estos últimos meses en Marruecos por el Peugeot 2008 DKR alentaron a todo el equipo en su temerario emprendimiento: “Las pruebas que realizamos confirman nuestras elecciones técnicas”, confirma Bruno Famin, Director de Peugeot Sport. Sin embargo, teniendo en cuenta la juventud de la máquina, se impone la prudencia: “abordamos esta aventura con ambición pero también con mucha, mucha humildad. Emprendiendo este programa rally raid a través de la prueba más dura, seguramente descubriremos muchos obstáculos y problemas. Debemos entonces tomar las etapas una a una. En este primer año, nuestro objetivo número 1 es llegar lo mas lejos posible con la mayor cantidad de autos”.
Experto en puesta a punto y habiendo circulado en cualquier tipo de autos, Carlos Sainz valida la pertinencia de las opciones técnicas: “El equipo preparó un auto muy especial, innovador, que ofrece una verdadera polivalencia para enfrentar los diferentes tipos de terrenos que podemos llegar a encontrar. El concept funciona bien. Al finalizar nuestros tests, sabemos que podemos ir muy rápido incluso si, como para cualquier auto de carrera en su primer año de existencia, es difícil estar al 100% de su confiabilidad”.
A 48 días de la largada, el programa está bien cargado: desde el 20 de noviembre, los camiones de asistencia, repletos de material y de piezas sueltas, partirán en el barco que los llevará a Argentina. Luego habrá que terminar de montar los tres autos de carrera que partirán en avión a mediados de diciembre, no sin haber efectuado una última sesión de pruebas en Marruecos, a comienzos de diciembre. Los pilotos deberán también someterse a un intenso curso de mecánica para prepararse para cualquier intervención de emergencia en sus autos o para enfrentar la etapa maratón (sin asistencia externa) que los espera en enero.
