La fisonomía de la ciudad muestra un aumento de locales comerciales vacíos, con cierre de tradicionales comercios, por caso la Librería Ameghino y el restaurant Sara de O de Oroño al 1400.
“Al comerciante le cuesta sostener la estructura actual con menos ventas y más gastos, es un combo que hace imposible la continuidad de la actividad” sostiene Andrés Gariboldi en diálogo con Fisherton CNN.
Para el titular de Dunod Propiedades el cierre de locales va más allá de la imposibilidad de pagar un alquiler. Tiene que ver con actividades que bajo las circunstancias actuales de recesión e inflación no son rentables. “Hay una toma de decisión que el negocio no funciona más”, enfatiza el empresario.
Sumada a esta situación Gariboldi reconoce que la renovación de un contrato de alquiler es una gran complicación: “Para los que se le termina el contrato de alquiler se encuentran con un nuevo valor locativo que refleja la inflación que no se cobro más la que vendrá en el plazo del nuevo contrato. Nosotros le pedimos a las partes que lleguen a un punto de equilibrio, porque lo peor que le puede pasar al propietario es que el inmueble quede desocupado”.
En relación al mercado de la vivienda las inmobiliarias esperan para el próximo mes un gran dinamismo en el negocio de los alquileres para estudiantes, donde Rosario es una plaza fuertemente demandada.
“El mercado esta muy ofrecido porque hay mucha vivienda que ingresó en el mercado locativo porque los propietarios no pudieron vender. Hay mayor número de unidades con lo cual hay mayor poder de negociación para el inquilino” analizan desde Dunod.
Quienes se corrieron de la compra de inmuebles
“El productor agropecuario al igual que tenedor de moneda dura se corrió de la compra de propiedades. Hoy el que compra es el que está posicionado en pesos, y lo hace en nuestro caso con un 30% de anticipo y 30 cuotas en pesos actualizadas en base al Indice de la Cámara de la Construcción.” finaliza Gariboldi.
REDACCION ON24