Aunque la semana pasada se logró un gran avance en la siembra de trigo, alcanzando el 27% del total a implantar, los excesos hídricos ponen en jaque el progreso.
El centro sur santafesino lleva implantado un 35% del área, cuando el año pasado, en esta misma fecha, ya se había sembrado la mitad del área. Aunque los registros de precipitaciones durante esta semana fueron menores a los 10 mm, la alta humedad ambiental impide que los suelos se oreen.
El reciente informe del GEA de la Bolsa de Comercio indica que, la ventana de siembra para los ciclos largos se achica y, si bien no hay intenciones de bajar la intención de siembra, ya muchos productores buscan semilla de ciclos cortos. Pero la disponibilidad de semillas podría poner límites a la siembra triguera.