En los últimos días de agosto y primeros de setiembre, lluvias inusuales se abatieron sobre Buenos Aires. A partir de esta situación, sobre el núcleo triguero las pérdidas de hectareaje están proyectadas entre 50.000 y 90.000 ha.
El ultimo informe de la Guia Estrategica del Agro de la Bolsa de Comercio de Rosario apunta que, para el resto de la provincia Buenos Aires, que no fue afectado por las lluvias o por suelos saturados, y para las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, La Pampa, Córdoba e inclusive las del NEA, existe el potencial de alcanzar muy buenos rindes si llueve en los próximos quince días.
La principal amenaza para la campaña 2014/15 es que continúe el patrón húmedo en septiembre y el área bonaerense perdida por anegamientos siga en aumento.