Una red de estaciones de servicio quedó en la mira de la UIF. Se trata de activos venezolanos de la petrolera PDVSA, que cuenta con 51 bocas de expendio en Santa Fe, Buenos Aires, Capital Federal, Córdoba y Entre Ríos.
Es una movida del gobierno argentino en plan de ponerle más presión al régimen de Nicolás Maduro. Con ese objetivo, la Unidad de Información Financiera hará un seguimiento de los movimientos de la petrolera que podría desembocar en un eventual bloqueo de sus activos en el país, tal cual lo hizo Estados Unidos.
PVDSA tiene escasas operaciones en el país, las cuales son canalizadas a través de la petrolera del Cono Sur y con la marca PDV Sur o Sol. En 2018, la empresa apenas vendió el 0,5% que se expenden en surtidores y representa el 1% del share del mercado.
En Argentina, las operaciones de PDVSA tuvieron su esplendor en épocas del kirchnerismo, cuando el entonces presidente venezolano, Hugo Chávez, empezó a amasar una fuerte expansión de la petrolera con la intención de vender el producto, la infraestructura y los servicios mientras el país pasaba por una pronunciada crisis energética.
En 2017, cuando el gobierno venezolano dejó de subsidiar a su filial argentina, PDVSA perdió $100 millones.
REDACCIÓN ON24