Se concretó una esperada renuncia a un loteo. Finalmente, y luego de numerosas idas y venidas, Gilli Inmobiliaria se apartó de la administración del barrio abierto Villa Don Carlos, ubicado en Villa Constitución.
La noticia se conoció en antes de la asamblea de vecinos que se realizó el pasado sábado, donde alrededor de 400 compradores votaron aceptando la dimisión y nombrando a los nuevos administradores. Además, formaron una junta fiscalizadora compuesta de siete miembros.
La historia del loteo es un rosario de malos tragos. Comenzó en 2011 con el respaldo del propio Municipio, que entendía que sería una herramienta para morigerar el déficit habitacional de la ciudad; pero pasados más de siete años de su inicio no están terminadas ni siquiera las obras básicas que les permitan a los vecinos comenzar a construir sus viviendas en el lugar. Se trata de un predio de 50 hectáreas dividido en más de 800 parcelas.
Habiendo conseguido que finalmente la Justicia haga lugar su reclamo y con la renuncia sin condiciones del Grupo Lands (detrás del cual está Gilli), los compradores buscarán reencauzar el fideicomiso y extender su plazo, dado que su vencimiento está pautada para enero de 2019.