La Cámara Argentina de Comercio y Servicios emitió ayer una declaración titulada “Una visión para nuestro país”, en la que detalló logros y debes del actual gobierno nacional de Mauricio Macri y también sentó posición de cara al próximo año electoral.
“Es imperioso poner fin a la incontinencia secular en materia de gasto público, mal que está en la base de nuestras recurrentes crisis macroeconómicas. En definitiva, se requiere dar por superado de una vez y para siempre el populismo, reafirmar el imperio de la ley y consolidar las instituciones republicanas y la división de poderes. Solo así será posible que nuestra Nación alcance el progreso al que los argentinos aspiramos”, reza el artículo.
Más allá de medidas de política económica, agrega, “la entidad está convencida de que es imprescindible consolidar un cambio institucional y cultural en nuestro país”. En ese sentido, sostiene que la sociedad argentina está “atrapada en el cortoplacismo y acostumbrada a vivir por encima de sus posibilidades”, por lo que considera que “es necesario reinstaurar la previsibilidad y la cultura del esfuerzo”.
“En una economía que entre 1900 y 2017 tuvo 107 años de déficit fiscal –y que, al financiarlo mediante emisión, generó una inflación desmesurada que llevó a la supresión de 13 ceros en la moneda nacional–, urge establecer un manejo prudente de las cuentas públicas”, manifiesta.
La declaración de la CAC destaca el fin del “cepo cambiario”, la salida del default, la recomposición de las reservas del Banco Central y el inicio de una política de reducción de los subsidios a los servicios públicos. Asimismo, también resalta “las importantes obras públicas destinadas a modernizar una infraestructura deteriorada (sin los escandalosos sobreprecios de otrora); la expansión del transporte aéreo; las inversiones en el yacimiento Vaca Muerta; así como la implementación de las PPP (Participación Publico Privada); y leyes como las de Financiamiento Productivo y la Ley Pyme”.
Fuera de la esfera estrictamente económica, remarca “la recomposición de las relaciones con las principales naciones del mundo, el avance en la lucha contra el narcotráfico, el respeto por la libertad de prensa y de expresión de la ciudadanía y la independencia entre los poderes del Estado”.
Sin embargo, apunta, “el año 2018 estuvo signado por una fuerte depreciación de la moneda local, que derivó en una aceleración inflacionaria y caídas de los niveles de actividad”. En lo que respecta a Comercio y Servicios, “los últimos datos disponibles acusan el impacto de la crisis en materia de actividad y las muy elevadas tasas de interés, producto de la política contractiva llevada adelante por el BCRA para contener la inflación, comprometen a las empresas, especialmente a las pymes”, señala.
“En los tres años de gestión del presidente Macri, la inflación se mantuvo elevada, mientras que el PBI solo creció en 2017. Por otra parte, no se logró bajar significativamente el empleo en negro y la informalidad en general; la deuda pública se incrementó; las exportaciones han tenido hasta el momento un dinamismo limitado; y los abultados déficits gemelos (fiscal y externo) recién comenzaron a corregirse sensiblemente en 2018 –en el marco de la crisis que hoy nos afecta–, al igual que el exorbitante gasto público heredado, récord absoluto en nuestra historia”, indica y agrega que “los niveles de riesgo país, en tanto, evidencian la desconfianza que nuestra economía aún genera en los inversores mundiales”.
Los empresarios nucleados en Comercio y Servicios consideran que este escenario se debe a “ciertas falencias de gestión, el deterioro del contexto internacional y la sequía que afectó a la última campaña agrícola”, por lo que sostienen que “el principal reto en materia económica” que tiene el gobierno es “reducir el costo argentino, un mal de larga data que erosiona nuestra competitividad”.
REDACCIÓN ON24
