Hoy más que nunca, el hombre de campo está atento a los vaivenes del clima y en alerta ante episodios que podrían dañar su cosecha. Es por eso que el productor se vuelca cada vez más a la cobertura que brindan las compañías aseguradoras contratando pólizas contra granizo, incendio, viento, heladas y planchado de suelos.
En la Argentina uno de los lugares con más frecuencia de caída de granizo es la provincia de Córdoba seguida por Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires.
El clima ya le está jugando una mala pasada a los cultivos, con los consiguientes recortes en las estimaciones de la cosecha de trigo y la siembra de maíz.
“El seguro contra granizo tiene tres grandes pilares, brinda una cobertura económica, financiera y social”, indica el ingeniero agrónomo Carlos Comas, Gerente de Riesgos Agropecuarios de La Segunda Seguros, compañía líder por tercer año consecutivo en seguros agrícolas.
“Es económico porque el seguro es resarcitorio, se cobra dinero. Es financiero porque te da plata para continuar con una nueva campaña. Y es social porque evita que las adversidades climáticas expulsen a los productores del sistema”, detalla Comas para Agroverdad.
El directivo de La Segunda Seguros precisó que actualmente en Argentina un 47% de la superficie sembrada con los principales cultivos está asegurada, porcentaje que aún dista mucho del 90% de cobertura de tierras productivas en Estados Unidos.
“En 2012/13 se registró una granizada al inicio de la campaña que permitió alcanzar el 60% de superficie sembrada asegurada”, indicó, al tiempo que alentó a los productores agropecuarios a estar protegidos.
“Contar con algún tipo de cobertura no sólo no implica una gran inversión sino que además evita grandes dolores de cabeza”, destaca el ejecutivo en dialogo con Agroverdad.