La ejecución presupuestaria de la Municipalidad de Rosario arrojó un déficit equivalente a $ 842,9 millones de pesos para el ejercicio 2017, pese a que los recursos provinciales y nacionales se incrementaron en 81% y 32%, respectivamente. Este rojo fiscal significa un aumento del 22,5% respecto al desequilibrio del año anterior y representa el decimoséptimo año consecutivo con resultado negativo. Así lo revela un informe del Centro de Investigaciones Sociales y Económicas (CISE) de Fundación Libertad.
Según el estudio, en 2017 los ingresos municipales (corrientes y de capital) totalizaron $12.066 millones de pesos, es decir, un 35% más conrespecto a 2016. Si se consideran préstamos u otros financiamientos, los recursos ascendieron a $ 14.984 millones, lo que implica un crecimiento del 41,1%. En ambos casos, el incremento es superior de la inflación calculada por el IPEC: 26,1%.
En cuanto a la procedencia de los recursos, el informe señala que los de origen municipal treparon a $6.857 millones representado el 45,8% del total y registrando un incremento del 33,5% en relación a 2016.
En tanto, los provinciales ascienden a $4.665 millones (31,1% del total) y con una variación anual del 81,1%. “Esta suba se explica en gran medida por los créditos otorgados por la provincia a la municipalidad de Rosario, fundamentalmente en concepto de adelantos de coparticipación”, explica el estudio, y agrega que “el sector público provincial se ha convertido el año pasado en el principal acreedor del stock de deuda de Rosario, al representar casi el 50% de la misma”.
Por último, los recursos de origen nacional sumaron $2.367 millones (15,8%), con un incremento del 32%. Los mismos se componen casi en su totalidad por la Coparticipación Federal, con $2.108 millones.
En lo que respecta a recursos no tributarios de origen municipal, se destacan las multas con una recaudación de $195 millones, las cuales equivalen a poco más del 60% de este tipo de ingresos, que evidenciaron un aumento de apenas el 6,2% en relación al año pasado.
Por su parte, los gastos totales (corrientes y de capital) de la Municipalidad totalizaron $12.909 millones, es decir, un 34,1% más en la comparación interanual. De ese monto, $ 11.322 millones se destinaron a erogaciones corrientes, mientras que $ 1.586 millones a gastos de capital. Si se consideran las aplicaciones financieras, los gastosascendieron a $14.216 millones lo que equivale a un crecimiento de 35,1% con respecto al ejercicio anterior.
Dentro de los gastos corrientes, los cuales representan el 79,6% de los totales, sobresale el gasto en personal con una participación del 41,2% sobre del total ($5.861 millones) y con un incremento respecto a 2016 del 30,7%. En cuanto a los gastos de capital (11,2% del total), la cuenta Inversión Real Directa (IRD) con $970 millones abarca la gran mayoría de este tipo de gastos y con una participación dentro del gasto total del 6,8%.
“Es decir, el municipio gasta en personal 6 veces más que en obra pública”, apunta el informe y añade que “la cantidad de empleados públicos municipales asciende a 11.503 personas, de acuerdo a lo informado en el Presupuesto 2018”.
De esta manera, el informe expresa que “las cuentas públicas de Rosario registran un déficit de carácter estructural, que luego se revierte con diversas fuentes de financiamiento”. En ese sentido, concluye que “es momento de plantearse la necesidad de efectuar políticas públicas que deriven en un sector público más eficiente y ordenado, cambios que inexorablemente son de mediano y largo plazo, pero que, cuanto antes, deben encararse”.
