La Resolución 3525 de la AFIP, publicada en el Boletín Oficial en agosto del año pasado, que aumentó el mínimo no imponible a $ 15.000, generó distorsión y fue un verdadero dolor de cabeza para los contadores que en abril y mayo de 2014 tuvieron que hacer las liquidaciones de ganancias.
“Los contadores hemos sido maltratados con una falta de respeto como no se veía en mucho tiempo”, aseguró la contadora rosarina Germana Figueroa Casas, del Estudio Castro & Fernández. “La liquidación de ganancias de este año fue la peor en muchos años. Fue una tortura. Hubo presentaciones, incluso, de los Consejos y de la Federación, pero fueron ignorados”, recalcó.
Para la profesional, la resolución de la AFIP y su reglamentación que emitió el gobierno fue “un parche” más, “sin pensar a futuro”, por lo que para 2015 “lo van a tener que arreglar”.
Concretamente, Figueroa Casas indicó que aquella norma, que produjo serias confusiones el año pasado entre los contadores, “armó una categoría que era para los que ganaban menos de $ 15.000 durante la primera mitad del año pasado”.
Entonces, explicó la contadora, para ellos no iba a regir el impuesto, por tanto, un empleado que ganaba $ 12.000 no pagaba ganancias. El tema es que, de acuerdo a la resolución y, según Figueroa Casas, “ahora ese empleado podría estar ganando $ 30.000 y tampoco se le hacen las retenciones. En cambio, alguien que ganaba $ 15.500 y ahora gana lo mismo, en este momento se le hacen las retenciones”.
Además, señaló la profesional, existe “una injusticia” con los trabajadores autónomos, “que aún siguen con las deducciones anteriores”.
REDACCIÓN ON24
