A poco menos de dos años desde su máximo logro como deportista, el alemán de ascendencia finlandesa, Nico Rosberg sorprende por su presente laboral, alejado en gran manera de la principal categoría del automovilismo.
En sociedad con su esposa, la diseñadora Vivian Sibols, el ex piloto se dedica a invertir en tres áreas comerciales: bienes raíces, gastronomía y movilidad eléctrica y asegura encontrarse en la mejor etapa de su vida.
“No hay un camino único. Valentino Rossi sigue ahí un año y otro y otro…Pero yo sentía que era lo que tenía que hacer. Y soy muy feliz en mi vida”, aseguró Rosberg esta semana en dialogo con la prensa.
Resulta que además de ejercer como comentarista de la Fórmula 1 para la cadena Sky Sports, Nico cuenta con una heladería en Ibiza, llamada Port Vell, en homenaje al lugar en donde se conoció con su esposa.
En paralelo, el alemán cuenta con varios departamentos puestos en alquiler en el Principado de Mónaco e invierte en la Fórmula E y otros proyectos relacionados con el transporte de energía eléctrica, entre los cuales se destaca el de un “taxi volador” para las grandes ciudades de Europa.
“Creo que todo será eléctrico. En Ibiza en unos cinco años, en el resto de países en siete o 10, pero va a ser mucho más rápido de lo que pensamos. Ya en los próximos años van a aparecer muchas novedades de vehículos eléctricos”, concluyó.