Convocado por la empresa Druidics, Ubaldo Matildo Fillol, el mítico arquero campeón del Mundial ´78, contó sus experiencias personales y cómo aparecen los líderes en los momentos difíciles para imponerse a la adversidad. Además, habló del rol de Diego Maradona y Lionel Messi dentro de un equipo.
Quizás el puesto más injusto dentro de una cancha de fútbol es el del arquero, prácticamente nunca festejan goles y sin embargo, terminan padeciéndolos, independientemente del nivel de responsabilidad que tengan. El “Pato” no ignora eso y en diálogo con ON24 apuntó: “Nos toca revertir situaciones adversas permanentemente, porque cuando viene la buena todos te felicitan y se termina. Hay que trabajar contra la adversidad y el elogio a veces es bueno, pero en otros casos es malo. Es necesario pararse sobre los fracasos para mejorar”.
Al mismo tiempo, el ex jugador de River insiste en que es necesario desdramatizar sobre los problemas. “Es imposible no equivocarse, el error de algún u otro momento llega, al igual que las cosas buenas”, continuó.
La polémica sobre la grandeza de Messi o Maradona parece que nunca terminará y más allá de la dimensión de cada jugador, Fillol los conoció desde cerca, con el ídolo del Napoli compartió equipo, mientras que con el del Barcelona formó parte del cuerpo técnico que lo tuvo en el sub20. “Tienen distintos estilos, Diego resolvía los problemas en los partidos cuando las cosas iban mal, pero además, dentro del vestuario nos arengaba. Lionel es indiscutido dentro de la cancha, pero no tiene el mismo rol en los entretiempos”, aseguró.
Por otra parte, los futbolistas, al igual que los directivos de las empresas deben sostener la motivación en sus empleados, pero también en lo personal. Según el “Pato”, “cuando se llega al máximo hay que entender el esfuerzo que permitió alcanzarlo”, ya con ese punto de partida, “sostener el rendimiento para seguir en la cima”.
A horas del comienzo del mundial, no faltó la palabra para que el arquero haga referencia a la selección argentina y ahí se mostró optimista con lo que puede llegar a conseguir el equipo de Sabella. Además, se esperanzó: “Ojalá no haya ningún cuco porque a los europeos les cuesta Sudamérica”.
Redacción ON24