El servicio puerta a puerta que, según cifras oficiales, mueve unos 16.000 pedidos por día, es de los más usados por los argentinos para comprar en el exterior. Otros –los menos– optan por el más caro servicio de courier que dan compañías como DHL o FedEx pero la mayoría de los pedidos entran, al país, a través del correo y se nacionalizan por Afip.
La ecuación de tarifas y costos para traerlos, sin embargo, no deja de ser complicada. Con el nuevo precio del dólar, se encarece “darse un gustito” y traer gadgets del exterior. No es lo mismo hacerlo con un dólar a $20 que con otro que roza los $25.
Lo primero que hay que saber es que al precio final, dolarizado, hay que sumarle otros “costos ocultos”. En principio, el de la franquicia que es anual, de US$ 25, e implica que si se hace un pedido por encima de esa cifra corresponderá pagar impuestos. Siempre es del 50% por encima de la franquicia. Entonces, si pedimos un teléfono de US$ 200, se deberá abonar US$ 87,5. Ese celular de US$ 200 termina saliendo, sumandole tasas del correo ($120 en todos los casos), US$ 292.
Entonces, ¿conviene seguir comprando tecnología afuera? Ya antes de la suba del dólar, el gobierno había implementado una serie de medidas pensadas para que los costos de la tecnología puertas adentro se redujesen. La baja del arancel a las computadoras al 0% redujo el precio de cara al consumidor final. Tanto es así que, el comercio de Chile, al menos en lo que a tecnología respecta, ha disminuido significativamente. Se le suma el tema de la financiación: las cuotas sin interés y los planes de los retailers que, varias veces al año lanzan ofertas como el Hot Sale o el CyberMonday para liberar stock, hacen que la compra local sea más atractiva.
Por caso: comprar un Samsung S9 en el exterior sale US$ 800; en el país, se vende en alrededor de $23.000. Si a ese celular se le suman los impuestos de ingresarlo por el puerta a puerta, ya no sale US$ 800 sino US$ 1.187, unos $29.000 a cambio de hoy. Antes de la devaluación de los últimos días, el precio ya hubiese estado casi igual que acá: $22.500. Ahora, con un dólar significativamente más caro, conviene mirar a las ofertas del exterior con un ojo más clínico.
Fuente: infotechnology