Innovación es la palabra que nunca puede faltar en una automotriz, la necesidad de mejorar en cada detalle potencia el crecimiento que han tenido en los últimos tiempos. El desarrollo de materiales más ligeros y resistentes, diseños sustentables e insumos eficientes transforman al sector en uno de los más especializados del mundo. Rubén Daray, uno de los periodistas más destacados en materia de automovilismo, explicó los pasos agigantados que dio la industria para transformarse en lo que es, pero también, analizó los cambios que se vienen.
“La evolución más importante de los últimos 30 o 40 años está vinculada con los materiales, la calidad de los lubricantes, el diseño y la electrónica. Esta última revolucionó todo lo que se concibe como auto desde su utilidad hasta el manejo, lo modificó radicalmente”, apuntó el conductor del programa “A Todo Motor”.
De esta forma, las diferencias que se fueron generando permitieron repensar el vehículo como un espacio más de la vida cotidiana y ya no, una herramienta que permite trasladarse de un lado a otro. “En las autopistas hay cada vez más congestionamiento y ese tiempo tiene que ser ameno, por eso, nacen los equipos de música, las pantallas táctiles, los asientos electrónicos. Es necesario considerarlo un lugar de esparcimiento”, analizó Rubén Daray.
Sin ir muy lejos en el tiempo, algunos modelos que hoy circulan por las calles contrastan con las novedades del mercado. En este sentido, el campeón del TC 2000 destacó: “Los autos que tienen 25 años o más son mucho más cuadrados que los actuales donde las esferas predominan en su diseño. Además, los parantes eran rectos y ahora se inclinan hacia adelante, pero uno de los cambios más importante aparece sobre el parabrisas, actualmente le brindan rigidez al modelo, están pegados en la carrocería, apoyan las bolsas de aire y mantienen a las personas dentro. Antes eran un elemento más del vehículo, se sostenían con burletes de goma y hasta se filtraba el aire”.
Seguí leyendo en la revista de mayo
