Uno de los desarrollos inmobiliarios más importantes que haya visto la ciudad de Rosario tuvo su broche de oro ayer, cuando Fundar, Rosental Inversiones y Wyndham Hoteles cortaron oficialmente las cintas del complejo Alto Buró, ubicado en la intersección de Thedy y Junín, concluyendo así la cuarta y última etapa del proyecto Condominios del Alto.
El presidente de Rosental Inversiones, Lisandro Rosental, dialogó con ON24 sobre este emprendimiento que nació con una idea de su padre, Miki Rosental hace más de 12 años y que hoy, con un mes de funcionamiento, “nos ha asombrado” el nivel de reservas.
¿Qué sentiría hoy tu padre al culminar la saga de Condominios del Alto?
Era un desafío diferente para mi padre este proyecto. Incluso, hasta hubo algunos intercambios con los inversores de por qué iba a ser un desarrollo mixto y no solamente edificios de departamentos que se vendían más fácil. Entonces, el desafío era doble: por un lado, tenías que hacer un buen negocio económico y financiero y por otro, la satisfacción de, cuando se termina, decir: tenía razón.
Y tenía razón…
Sí… Más allá del negocio, hoy, ver Condominios III terminado, es totalmente diferente a que si hubiera sido un edificio de departamentos únicamente. Si mi padre hoy estuviera parado en frente mirando el desarrollo, hubiera tenido la sensación de haber estado en lo cierto, aun yendo contra viento y marea. Es misión cumplida, no se equivocó en nada.
¿Qué cantidad de viviendas aportan toda esta saga comprendida por Condominios del Alto I, II, III y IV?
Son cerca de 700 viviendas, que están a 10 cuadras de Oroño, con parques, pileta, chicos jugando… Nos sentimos muy orgullosos de lo que hemos hecho. Han sido más de 100.000 metros cuadrados construidos y la verdad que hay pocos proyectos que se han hecho de semejante envergadura, terminados en tiempo y forma.
¿Le falta algo a Puerto Norte para terminar de explotar?
No creo que le falte mucho. Este proyecto Alto Buró viene a completar lo que hace años arrancó Dolfines, siguió con Nordlink, Condominios, Ciudad Ribera y Forum. Cada uno hizo las cosas a su manera y ya no queda mucha tierra para desarrollar. Creo que le falta asentarse, que la gente tenga la doble traza para ir al Centro tranquilo, por ejemplo. Es un lugar muy lindo, falta que la gente viva el lugar. Hay shopping, paseos comerciales, complejos de viviendas, parques, costanera, torres de oficinas, restorán… Se viene Condos Refinería, que son 150 viviendas más; Condo Norte, con 100 viviendas más… Va a ser un lugar único en la ciudad, que hoy viene creciendo a pasos agigantados. Es decir, no creo que le falte mucho a Puerto Norte.
En tu discurso, decías que fue una muy buena articulación público privada para sacar adelante Alto Buró. ¿Qué rol cumplió el Estado?
Fue un facilitador del proyecto, nos ha acompañado en todo el proceso. Es cierto que fueron varias idas y vueltas con Planeamiento, pero estamos agradecidos a la Municipalidad.
¿Cómo ha sido la recepción de este nuevo hotel en su primer mes de vida?
Los hoteles nuevos tardan en consolidarse más o menos un año; los primeros seis meses suelen ser duros. Sin embargo, a nosotros nos ha asombrado lo rápido que se ha acomodado este hotel y ha pasado a número azul, estando por encima del punto de equilibrio ya en el primer mes. No es normal. Es una satisfacción. Además, las reservas futuras que estamos teniendo nos marcan una tendencia que nos pone muy optimistas.
¿Qué representó para Rosental la adquisición de Fen Hoteles por parte de Wyndham?
Todo cambio trae oportunidades y desafíos. Y el desafío es continuar en la línea de lo que habíamos logrado con Fen, es decir, hoteles bien atendidos y que generaban valor para el inversor. Con el tiempo que ha pasado, te puedo decir que se está cumpliendo igual o mejor respecto a cuando estábamos nosotros. Además, le da el plus de que es la cadena hotelera más grande del mundo, lo que nos potencia y tracciona público de otra manera.
¿Es tentador hoy un nuevo proyecto inmobiliario teniendo en cuanta tasas financieras a 33%?
Si te lo respondo fácil, no. La tasa de Lebac al 37% es imbatible para el corto plazo. Pero nosotros confiamos en un país a largo plazo y en que las variables macroeconómicas se van a estabilizar. En función de eso, nuestros intereses hoy están puestos fuertemente en el real estate. Nosotros nunca miramos los negocios para mañana. La clave es mirar a largo plazo y nosotros somos optimistas para invertir en Rosario.
¿Cambió el negocio de los desarrollos inmobiliarios?
Es más difícil hoy llegar al inversor intermedio porque hay menos margen entre la construcción y la venta, por lo cual tenemos que ir a un modelo de desarrollo apuntando al consumidor final, donde uno también tiene que cambiar sus expectativas respecto a la duración del negocio. Antes, recuperabas la inversión en tres años y hoy eso no existe más. Pasaron 12 años desde los comienzos de Condominios del Alto y recién la estamos viendo ahora. El inversor sabe que eso cambió, pero vemos que sigue habiendo apetito por el real estate, la población crece, el déficit de vivienda sigue existiendo y las viviendas usadas son finitas.
REDACCIÓN ON24